Redacción Canal Abierto | Los 1.761.647 votos por los que Sergio Massa superó a Javier Milei en las elecciones generales no significan, ni cerca, una pelea ganada. En el balotaje que ocurrirá el próximo 19 de noviembre cada voto cuenta y la forma en la que se posicionen las distintas fuerzas políticas será clave.
El primer electorado a seducir, en número, es el que se inclinó por Patricia Bullrich el domingo pasado: 6.267.152 votos que se encolumnan detrás de alguna de las fuerzas que integran Juntos por el Cambio (Propuesta Republicana-PRO, Unión Cívica Radical-UCR, Coalición Cívica ARI y Encuentro Republicano Federal), unidos menos por un ideario común que por un antiperonismo histórico.
Juntos: entre la dispersión y la ruptura
El posicionamiento de Juntos como bloque aún no se conoce —tanto la UCR como el PRO se juntarán este miércoles para deliberar su posición, por separado— y quizá nunca exista como tal. Pero sí comenzaron a pronunciarse distintos referentes que evidencian lo divida que está la alianza.
El primero en hablar fue el dirigente radical Facundo Suárez Lastra, quien aseguró el mismo domingo en la red X (ex Twitter): “No cuenten conmigo para votar a Milei. Como dijo Hipólito Yrigoyen, hay que empezar de nuevo. Lo que supere al populismo deberá ser liberal progresista y socialdemócrata”. Luego agregó que “Javier Milei es el límite” porque “alguien tan sectario, autoritario y con tan poca apertura a lo diverso le hace mal al sistema democrático”. Sin embargo más tarde aclaró: “Ni con Massa ni con Milei, el 19 de noviembre mi voto es en blanco para apostar a construir una verdadera oposición progresista”.
En una línea similar se pronunció el legislador provincial radical de Córdoba Dante Rossi: “Está claro que no hay manera de que yo vote por alguien que insulta a Raúl Alfonsín, intenta privatizar la educación, la salud y las jubilaciones, desprecia a quienes tienen opiniones diferentes y apoya la libre tenencia de armas. Esa Argentina no es la que quiero”.
Rossi se refiere a las declaraciones recientes de Milei en las que señala a los radicales como “traidores alineados a la Internacional Socialista” y “consuetudinariamente estafadores”, características que también le adjudicó al ex presidente Alfonsín, cuya cara le había puesto al muñeco que utilizaba para entrenar boxeo.
Asimismo, dirigentes y militantes del Movimiento Nacional de la Militancia Radical (MNMR-UCR), que lidera Luis “Changui” Cáceres, aseguraron en un documento titulado “Con Milei, ni a la esquina”: “Como radicales, jamás podríamos votar a Milei y sus propuestas totalitarias, antidemocráticas. Las opciones son Massa o la abstención, pero ésta última favorecería a Milei”.
En tanto, el expresidente de la Unión Cívica Radical de Chubut, Mario Cimadevilla, le envió una nota pública al actual titular Gerardo Morales, donde manifiesta que el proyecto que representa Massa “ofrece al electorado un proyecto de gobierno y de país más afín al tradicional ideario de la Unión Cívica Radical frente a quienes desprecian la necesaria función reguladora del Estado, aborrecen la educación y la salud pública, rechazan la soberanía monetaria, y cuestionan el necesario apoyo estatal a la investigación técnica, científica y cultural”. A su vez, la vicepresidenta del Comité Nacional de la UCR, María Luisa Storani, anticipó la posibilidad de que el radicalismo decida apoyar a Massa en el balotaje.
Otro de los socios de Juntos por el Cambio vapuleado por el candidato de La Libertad Avanza fue la Coalición Cívica, que ya comunicó que no votará “por ninguna de las dos opciones que competirán en el balotaje, las que proponen gobiernos irresponsables basados en imposibilidades morales y políticas y pacto de impunidad”.
El PRO, por su parte, arrastra consigo una interna feroz encarnada por Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, donde la figura de Mauricio Macri genera todavía más ruido por su simpatía manifiesta hacia Milei, que muchos consideraron determinante en la derrota del domingo.
Y, si bien podría inferirse que se electorado está más cerca de las posturas de Milei que de las de Massa, todavía están muy frescas en el recuerdo de dirigentes y militantes las expresiones del líder de La Libertad Avanza donde sostuvo que “Bullrich era una montonera y asesina tirabombas que ha puesto bombas en jardines de infantes” y calificó a los dirigentes de la fuerza como “globoludos”, “miserables” y “Juntos por el Cargo”.
Por otro lado, los ocho gobernadores electos de Juntos también se reunirán este miércoles en la ciudad de Buenos Aires para diagramar una postura conjunta de cara al balotaje, si bien nadie sabe a ciencia cierta cuánto influya la posición general del partido en un electorado volátil y muy lejano a la organicidad.
Las demás fuerzas
Quienes también se reunirán para fijar una posición conjunta son los líderes del Frente de Izquierda y de Trabajadores – Unidad (FIT-U). Pero su excandidata a presidenta, Myriam Bregman, respondió al ser consultada sobre si pensaba que entre ambas opciones electorales no había diferencia: “No, ¿cómo voy a decir que son los mismo? No son lo mismo. Nadie puede decir que son lo mismo Milei y Massa”.
Milei había calificado a esta fuerza como “zurdos de mierda”, pero en la campaña de seducción de votantes que comenzó el lunes, el candidato declaró que podría incorporar miembros del FIT al Ministerio de Capital Humano: “En ese tema son los que más saben y pueden ayudar, por lo tanto me importa tres rábanos lo que piensen de la teoría valor-trabajo”.
Desde el Interbloque Federal, que apoyó la candidatura presidencial de Juan Schiaretti (Hacemos por nuestro país), también hablaron. El diputado nacional Alejandro “Topo” Rodríguez destacó la convocatoria que hizo Massa “a un gobierno de unión nacional y su apelación a la paz” y su par Natalia De la Sota planteó que esta propuesta sería útil para “para terminar con esta Argentina agrietada”.
Otras fuerzas también se pronunciaron. Libres del Sur convocó a votar por Massa en el balotaje para “evitar un nuevo gobierno” de la “derecha antinacional, antipopular y retrógrada» que representa Milei.
Por su parte, los socialistas santafesinos que apoyaron la candidatura de Schiaretti adelantaron que descartan el apoyo a Milei en la segunda vuelta y la próxima semana se reunirán para definir si llaman a votar a Massa, en blanco, o dan libertad de acción a sus electores.
De igual manera se pronunció el legislador porteño por el Partido Socialista, Roy Cortina, quien aseguró este martes en sus redes: “Ballotage: Es obvio que Milei NO”.
También se manifestó Guillermo Moreno, de Principios y Valores, fuerza que se había quedado afuera en las PASO y que había llamado a votar en blanco en las generales. “Voy a votar a Massa”, dijo en X y en distintos medios de comunicación a lo largo del lunes.
Foto: France 24 / AFP