Redacción Canal Abierto | Mauro Millán es longko de la comunidad mapuche Pillán Mawiza, asentada en la región del Corcovado, a unos 80 kilómetros de Esquel. Allí defienden al río Carrenleufú de ser sacrificado para construir una presa hidroeléctrica que detendría sus aguas que corren cristalinas hacia el Pacífico.
En estos días, enfrenta un juicio por usurpación junto a otras siete personas del lof Che Buenuleo, comunidad que reivindica la ocupación ancestral de tierras en la llamada Pampa de Huenuleo, al sur de la ciudad de Bariloche.
La posesión comunitaria de estas tierras se remonta a 1909 cuando por la Ley Pastoril se le entrega a Antonio Buenuleo –tatarabuelo de Ramiro– un lote de 625 hectáreas, el lote pastoril 127, en la, entonces, colonia Pastoril Bariloche. Las sucesivas administraciones fueron corriendo el lote hasta dejarlo arrinconado contra el cerro Ventana, en parte del cual, pasado el tiempo, se conforman Pilar I y Pilar II, los últimos barrios del ejido municipal de San Carlos de Bariloche. “Pilar no es un pilar de luz”, ironiza Mauro en diálogo con Canal Abierto, “es Pilar Curinau, una de las ancestras de los Buenuleo”.
¿Una usurpación a 500 kilómetros de su comunidad?
Esta causa comienza en el 2019. Mauro es convocado por la comunidad para la reivindicación de un territorio cuyos antepasados habitan desde antes de la denominada Campaña del Desierto. “Es un espacio que para nosotros es un sitio muy importante en términos espirituales y de la relación que tenemos con la naturaleza. Es, ni más ni menos, que la naciente del río Ñireco, el mismo que abastece de agua a gran parte de la ciudad de Bariloche”, explica el longko.
“Mi rol de longko no sólo es un rol político, ideológico, filosófico, también tengo el deber de acompañar y levantar ceremonias que hagan que se vinculen ciertas comunidades con lugares muy específicos. No me puedo negar y fui”.
Mauro y los Buenuleo llegaron por la mañana, por el camino principal e hicieron la ceremonia. “Por normativa yo me debía quedar hasta el otro día. Sin embargo, a las dos o tres horas empieza a llegar gente con armas de fuego, cuchillos, y se dio una situación de mucha violencia por parte de esta patota enviada por un empresario (se refiere a Emilio Friedrich, quien disputa las tierras de la lof), amenazando de muerte a todo el mundo. Cuando esto se estaba por desbordar, la propia comunidad llama a la Fiscalía y cae la policía. Ahí se calma un poco la situación e incluso le secuestran un arma a una de estas personas”.
“Mi deber en términos espirituales y por la situación de mucha violencia que se vivía era quedarme y así lo hice. La Fiscalía armó un listado con las personas que se iban a quedar y esa lista se transformó en una acusación”. Así, quienes participan de una ceremonia, son imputados por usurpación, incluso Mauro que acude convocado como autoridad espiritual pero vive a 500 kilómetros de ese lugar.
En esta primera instancia, tanto el longko como el resto de los acusados (Mabel Buenuleo, Lucas Emmanuel Dinamarca, Nahuel Aucan Maliqueo, Nicolás Antonio Quijada, Ramiro Buenuleo, Sandra Noemí Ferman y Claudio Javier Raile) fueron sobreseídos al poco tiempo. Pero el Superior Tribunal de Justicia de la Provincia de Río Negro revisó el caso e hicieron volver todo a foja cero. Ese es el juicio que comienza este 7 de marzo y que pretende criminalizar a Millán y los Buenuleo.
Usurpación
“La imputación de usurpación en la Patagonia es la situación que viven cientos de hermanas y hermanos. Lo primero que hace el Estado cuando hay una situación de conflicto de tierras es echar mano al Código Penal, no a los derechos indígenas que ahí languidecen”.
El juicio se reinicia y se piden tres años de prisión para Mauro porque la querella lo señala como instigador e ideólogo de la recuperación de tierras. “Hay una demanda histórica de la comunidad Buenuleo que lleva décadas denunciando los manejos empresariales que hay en esa zona por parte de inmobiliarias y del poder político”.
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Consenso Bariloche
“Es muy evidente la injerencia que tiene hoy la política. Hay un grupo denominado Consenso Bariloche que son militantes del PRO, seguidores de Patricia Bullrich que alentan permanentemente a la condena, a la criminalización, a la persecución pública. Hace poco detuvieron a Matías Santana y según declara (Diego) Frutos, referente de Patricia Bullrich en la zona, civiles, personas que no eran de ninguna fuerza de seguridad, lo siguieron e hicieron inteligencia para que finalmente la Policía Federal lo detenga. Estamos hablando de un accionar parapolicial.”
“Como este, hay una gran cantidad de ejemplos de cómo operan el poder empresarial y político en Wallmapu, generando una situación denigrante del pueblo mapuche.”
“En esta situación, llegamos finalmente a este juicio, un juicio que tiene sentados a 8 integrantes del pueblo mapuche en el banquillo de los acusados. Nuevamente acusados. Yo estuve dos veces en ese territorio desde 2019 hasta ahora, en dos ocasiones, y sin embargo soy acusado de usurpar ese espacio”.
Foto principal: Denali Degraf