Por Melissa Zenobi | La obra, que se presenta los viernes en El Jufre Teatro Bar, describe una Argentina distópica donde ya no hay animales. Atrás quedó la fama mundial de nuestro país por la abundancia de cultivos, y el exquisito sabor de sus carnes. Ahora solo es posible consumir carne congelada, o de animales clonados. En este contexto, una expedición sale en búsqueda de esa última vaca en la faz de la tierra.
¿Qué comemos? ¿Cómo nos vinculamos con el ambiente? ¿Qué damos por sentado? ¿Cómo actúan las corporaciones? ¿Qué información le damos a la inteligencia artificial? A través del humor, diez personajes se entrelazan en cuatro historias, con el fin de reflexionar sobre estas y más preguntas. Una distopía que en algunos aspectos se vuele cada más cercana.
“Me interesa el universo de cómo y qué comemos porque es algo que tiene mucho para debatir, en cuanto a cómo se produce eso, quiénes comen, quiénes no comen. Es un tema que atraviesa también a las clases sociales”, explica Mariano Rosales, autor y director de Pampa Jungle.
Es que el asado es hoy tan popular como conflictivo: “Es tanto un símbolo de la comida como un conflicto de derechos. Está el derecho de los animales, del derecho a la alimentación y un conflicto cultural porque es una tradición. De la obra sale gente replanteándose el consumo de carne, y también sale gente con muchas ganas de juntarse a compartir un asado con amigos y familia”, dice.
Otro de los aspectos que desarrolla esta puesta tiene que ver con el avance de la tecnología y el rol de las inteligencias artificiales en la actualidad a través del personaje Eco, interpretada por Marianela Garay. Eco es una sátira del vínculo con bots o la IA.
No obstante, Rosales aclara que esta sátira está planteada desde un lugar bastante inocente, que tiene que ver con que la obra fue escrita entre el 2019 y el 2020, y desde entonces hubo un avance enorme de la inteligencia artificial, que a su vez abrió nuevos debates.
“Creo que hay un problema en pensar que los avances tecnológicos son buenos en sí mismos, porque siempre hay contextos y muchas veces esos avances pueden ser contraproducentes. Con la Inteligencia Artificial de hecho ya hay pérdida de algunos empleos”, opina Rosales, también coautor de la serie “Parte de una religión”.
Todo arte es político
La historia está encarada como una comedia de un tipo de humor que va de lo ácido al absurdo pasando por lo más cotidiano, con textos de los distintos personajes que configuran un guiño a la situación social y política del país. “El arte participa inevitablemente de lo político, porque todo es político en mayor o menor medida. Una obra que habla de la desigualdad me parece tan política como una obra que habla de la actualidad y no mencione que existe la desigualdad”, remarca el autor.
Reflexionando en torno al potencial político del arte, o del humor, opina: “El humor abre el juego para el encuentro con alguien que no está de acuerdo con uno, puede desarmar la posición que tiene. Igual depende del tipo de humor, si uno hace un chiste criticando a los genocidas a alguien que se saca fotos con genocidas, no creo que haya punto de encuentro”, dice Rosales.
En este sentido el director aclara que la obra se posiciona con una crítica a la derecha: “Porque la derecha que estamos viviendo es la destrucción de todo lo que uno considera digno de defender, y es difícil no hacerlo desde el humor porque es una derecha violenta y bizarra”.
“Esta obra es de ciencia ficción, pero estamos viviendo en un país que gobierna un tipo que clonó a sus perros, que habla con el fantasma de sus perros muertos, una mezcla de ciencia ficción con fantasía. En ese sentido, el potencial del humor es hacer esta experiencia un poco más abordable, para digerirla y, en el mejor de los casos, intentar transformarla”, sintetiza Rosales.
Ficha técnico-artística
Dramaturgia: Mariano Rosales
Actúan: Manuela Luz Alvarez, Facundo Baldissera, Oliver Carl, Joaquín De Las Carreras, Evangelina Devito, Juan Felipe Diez, Marianela Garay, Claudio Palmieri, Mariano Rosales, Carolina Zapata
Peinados y maquillaje: Rosarito Greguoli
Diseño de vestuario: Verónica Ieno
Redes Sociales: Julia Gel, Rosarito Greguoli
Diseño De Iluminación: Martín Antuña
Fotografía: Julia Gel
Diseño gráfico: Wanda Pérez Mainero
Asistencia de dirección: Gabriela Cuca Tedesco
Producción: Gabriela Cuca Tedesco
Dirección: Mariano Rosales
Viernes de agosto, 22:30, en El Jufré Teatro Bar (Jufré 444, CABA)