Por Inés Hayes | “Diría que es un disco de rock contemporáneo, para alguien podría ser un disco algo popero, y para otras personas puede ser un disco un poco raro”. Así define el cantautor, guitarrista y productor musical Gonzalo Gamallo a su nuevo disco, Cuartos.
Gamallo es fundador y parte de la banda La Joven Guarrior y tiene una extensa carrera como productor. Como solista editó dos discos (Paralelo y En vivo en espacio sísmico), siendo este su tercera y más grande apuesta. “Me formé y me sigo formando en el arte de la canción, analizo canciones, enseño sobre ellas, aprendo de ellas”, cuenta sobre su oficio diario, que se combina con ser padre y escribir de vez en cuando.
La escritura forma parte de un legado: su madre y padre escriben y su abuelo fue un reconocido escritor y editor; pero desde temprano Gonzalo fue atrapado por la guitarra. Dice él: “En el arte de la canción hay una especie de cruce de caminos donde algo de la poesía viaja al campito del sonido y arma una casita”.
La nueva producción de Gonzalo Gamallo comenzó a gestarse justamente “en casita”, durante la pandemia. “Me parece muy actual y apocalíptica la idea de que tenemos habitaciones en el cerebro y en realidad viviremos allí”, dirá sobre la génesis y el nombre del disco, y puntualmente sobre la letra que le da nombre, que comienza así: “Cuartos son los pedacitos de imaginación”.
El álbum consta de nueve temas y fue producido por Federico Nicolao y grabado en Eleven Palace y en Estudios Ion.
Aún definiéndose como cantautor, Gonzalo no cree que Cuartos sea un disco solista sino el disco de una banda: los músicos con quienes grabó están relacionados con su historia musical tanto como en su rol de cantautor como en el de productor. En las guitarras están Ignacio Margiotta y Agustín Zanolli -con quienes grabó tiempo atrás el EP Trío-; y con Eduardo Baeza y Manuel Lugea, bajo y batería de Cuartos, formó a su vez y hace años la banda Los Niños y Los Locos. A cantar se suma Vale Cini, con quien comparte escenarios desde hace una década. Por último, José Wilfredo Aguilar, con integrante de La Joven Guarrior, interpreta teclados, pianos y rhodes. “De alguna forma tomé retazos de todas estas experiencias para generar este álbum. Hay una sinergia, hay un sonido entre estas personas”, considera.
La otra persona es su hija, Catalina, una dibujante avezada y creativa: “Tiene que soportarme escuchando las mil versiones de las mil canciones en las que ando y a veces de algún modo comienza a involucrarse en las piezas”, confiesa su padre. Así fue que un día Gonzalo la buscó en el colegio y ella lo acompañó al estudio de grabación, donde él le comentó una idea: “Hacer algo un poco gris y opaco, como esta época, pero sin perder la ternura, que es algo que a veces le falta a la época”. Y así Catalina hizo el dibujo que le da tapa y cuerpo a lo de los Cuartos.
¿Qué trae este disco de nuevo en relación a tus producciones anteriores?
-Como todo en la vida, siempre hay una continuidad. Como de una relación a la otra, como de un recital al otro. La experiencia se va acumulando en algún lugar intangible y allí ofrece su sabiduría para lo que sigue. Este trabajo es sin dudas fruto de mis trabajos anteriores, estéticamente es muy diferente a mis trabajos solistas y tal vez suponga una síntesis entre mis trabajos en Los Niños y Los Locos y en La Joven Guarrior, mis bandas anteriores.
Es fruto del encuentro con mi productor Fede Nicolao, una pieza angular en este proceso. A quien me confié ciegamente. Con quien recorrimos todo el camino y quien pusiera mucho de sí, de su impronta y su imaginario sonoro al servicio de mis canciones. El aporte de los músicos implicados fue determinante porque si bien es un disco que lleva mi firma, fue un material trabajado con los músicos que participan. Con Fede buscamos ese borde entre un trabajo calculado y pensado y un sonido fresco y de banda. Es sin dudas mucho menos tradicional que Paralelo, mi anterior larga duración.
¿Cómo fue el proceso de armar el arte junto a tu hija?
-Es mucho más fácil aprender cuando uno es niño que cuando uno es adulto. Pasa con la bicicleta, con las prácticas del arte y con tantas otras cosas. Cata se desarrolla muy naturalmente en el campo expresivo.
El proceso fue absolutamente natural. En algún momento, mientras pensaba en la gráfica y en quién podría ser, apareció ella y se me ocurrió preguntarle cómo se vería una cabeza llena de habitaciones, en relación a uno de los puntos de fuga que se desprenden de Cuartos, la canción que da título al disco y que lo abre.
El resultado nos entusiasmó a los dos y lo que siguió fue pensar quién podría trabajar con ella si hiciera falta. Hace unos años edite un disco en vivo y para el arte trabajé con Luisina Jacinto. Conociéndola desde hace muchos años creí que ella era perfecta para esto. Finalmente Cata fue haciendo portadas para prácticamente todas las canciones del álbum y Luisana convirtiendo esos dibujos en diseños.
¿Qué sucederá en la presentación?
-En la presentación le daremos tracción a sangre a eso que quedó tan hermosamente plasmado en el disco, que por supuesto tiene otros ribetes y otros caracteres. Finalmente la música en vivo es aquello que nos distinguirá de las máquinas, la música con fluctuaciones en el tiempo, con calderones y momentos de improvisación. A mí me gustan los shows divertidos, que no son acartonados pero que son rigurosos y exigentes. Nos estamos preparando con muchas ganas, entusiasmo y máxima responsabilidad. Así que nadie sabe lo que sucederá, pero apuntamos a que sea un momento de comunión entre la gente y la banda. Y si todo sale bien, este concierto tal vez se convierta en un disco en vivo.
Gonzalo Gamallo presentará Cuartos el jueves 19 de septiembre en Galpón B (Cochabamba 2536, CABA).