Redacción Canal Abierto | El conflicto que protagonizan los gremios aeronáuticos de Aerolíneas Argentinas gana centralidad en la agenda pública, aunque con final aún incierto.
Impedida su privatización -por presión presión, se la bajó de aquel famoso listado de empresas a rematar-, el Gobierno adopta una estrategia que rememora los primeros años de la década del 90: el desgaste y vaciamiento de la compañía.
En la conferencia de prensa de este jueves 19 de septiembre, el vocero presidencial (hoy con rango ministerial) Manuel Adorni anunció que el Ejecutivo “inició conversaciones con varias empresas privadas latinoamericanas para hacer una sesión de operaciones de Aerolíneas Argentinas en caso de que continúen las medidas de fuerza que lleva adelante el gremio que conducen Biró y compañía”, desconociendo la multiplicidad de organizaciones obreras en la actividad.
La amenaza oficial, sumada al lock out patronal y la denuncia penal contra el secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), no es otra cosa que un paso en la estrategia mileista de “echar más leña al fuego”. Ya no sólo al interior de la aerolínea de bandera, sino sobre el sector transportista en su conjunto.
En la mañana del jueves, a la par del comienzo del paro de los trabajadores de ATE ANAC, en la sede de la Asociación Argentina de Aeronavegantes que conduce Juan Pablo Brey, se reunieron Pablo Moyano y Omar Pérez de Camioneros; Omar Maturano de La Fraternidad (conductores ferroviarios); Mario Caligari (UTA, choferes de colectivos); Juan Carlos Schmid (Fempinra, dragado y balizamiento); Pablo Biró (APLA, pilotos); Raúl Durdos (SOMU, portuarios) y el anfitrión.
Los dirigentes gremiales lanzaron la “Mesa Nacional del Transporte”: “en defensa de los derechos laborales, contra la precarización y cualquier intento de regular el derecho a huelga”. La foto debería generar preocupación en Casa Rosada, ya que podría ser la llave para una huelga general: si para el transporte, la economía no se mueve.
Es más, el flamante frente definió una nueva reunión que se llevará adelante la semana que viene, con el objetivo de establecer un “Plan de Lucha General”. Según trascendió, no descartan medidas de fuerza de alcance nacional.
“Nuestro eje es la defensa de la soberanía del país que está representada en las Rutas Nacionales, en los trenes, mares, ríos y cielos, frente al atropello cotidiano que vemos implementa el gobierno de Javier Milei en cada modo”, señalaron en un comunicado.
En la reunión coincidieron gremios de los dos espacios gremiales del transporte la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT, capitaneada por los Moyano) y la Unión General de Asociaciones Sindicales de Trabajadores del Transporte (UGATT, conducida por Maturano), los dos grandes espacios gremiales de la actividad.
El twittero oficial
Casi al unísono con esta reunión, Adorni aseguraba que “en la Argentina del Presidente Javier Milei prima la ley y el orden” y “quienes no respeten eso van a sufrir las consecuencias”, para luego afirmar que el Gobierno nacional va “a sepultar los piquetes gremiales y los privilegios de la casta aeronáutica».
“Ellos hablan de sepultar piquetes, de sepultar el derecho a huelga que está refrendados en la Constitución Nacional. Nosotros hablamos del cuidado de la vida, para nosotros eso es lo primordial y debería de ser una responsabilidad compartida”, sostuvo Mercedes Cabezas, secretaria Adjunta de ATE Nacional en la conferencia de prensa realizada en el marco de las medidas de fuerza de los trabajadores y trabajadoras de la ANAC, encargados de tareas de seguridad y fiscalización en todos los aeropuertos del país.