Redacción Canal Abierto | La Cámara de Diputados se preparaba para tratar una reforma a la ley 26.122 y limitar el uso de los Decretos de Necesidad y Urgencia por parte del Poder Ejecutivo. La sesión especial había sido impulsada por Encuentro Federal, Unión por la Patria, los radicales disidentes de Democracia por Siempre, y Por Santa Cruz.
A pesar de la decisión que se conoció ayer del PRO de no dar quórum, desde la oposición aseguraban esta mañana que contaban con las voluntades necesarias tanto para garantizar la sesión como para avanzar en la aprobación.
“De no mediar ninguna sorpresa o cuestión inesperada a las tres inicia la sesión y están los 129 votos para aprobar la reforma”, había asegurado el diputado nacional por Santa Fe, Estaban Paulón (Hacemos Coalición Federal), en diálogo con Canal Abierto.
Sin embargo, después del mediodía comenzó a circular la versión de que ocho legisladores del Bloque de Unión por la Patria no estarían presentes para garantizar el quórum. Finalmente, después de las 15, se confirmó la postergación de la sesión para el 21 de noviembre.
“El momento es cuando están los votos”
El nuevo régimen que propone el proyecto busca modificar la ley 26.122, “que viene del kirchnerismo y que facilita que el Ejecutivo pueda legislar por sobre el Congreso”, explicó el diputado.
Y agregó: “Cuando una ley llega al Congreso debe pasar por las dos Cámaras, hay un tratamiento en comisión, hay un debate en profundidad, lleva un cierto tiempo”. Sin embargo, “esa ley que sale producto de un consenso muy amplio tiene el mismo valor que una sale a sola firma del Presidente”, criticó.
“Esta es una anomalía institucional -subrayó- porque la Constitución es clara: el Congreso legisla y el Ejecutivo lleva adelante las políticas públicas”.
Como su nombre lo indica, los DNU son para casos de “necesidad y urgencia”, sin embargo “hoy Milei gobierna prácticamente por DNU”, y también los usa “para vetar las leyes que no le caen bien”. Por eso, “es importante que avancemos en esta ley porque le va a devolver un equilibrio a la institucionalidad argentina, no impidiéndole dictar los DNU al Presidente”. “Porque se ha hablado mucho que esta es una medida desestabilizadora”, aclaró.
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En esa línea, cuestionó la postura del oficialismo a la que sumaron otros espacios políticos como el PRO, que según La Política Online, paradójicamente, tiene a sus diputados como autores de la mitad de los proyectos de ley presentados para regular el uso de los DNU. “Siento mucha pena de escuchar a colegas que dicen ‘no, no es el momento’, ‘esto puede ser mal leído’, o ‘aprobémoslo y que sea a partir del próximo gobierno’”, indicó el diputado.
“¿Por que ayer era el momento y ahora no es el momento?”, planteó. “El momento es cuando están los votos y el consenso parlamentario para aprobar una ley, y hoy están”. “Es como si yo hubiese dicho que no había que aprobar el matrimonio igualitario en 2010 porque gobernaba Cristina. Y había gente que lo planteaba”, recordó.
En concreto, la medida establece que los DNU perderán vigencia si no son tratados por ambas cámaras del Congreso en un plazo de 90 días de su puesta en vigencia, y si son rechazados por una sola de las Cámaras legislativas, y ya no las dos como hasta ahora. Además, le otorga a los decretos un plazo de duración.
En la sesión también se buscaba tratar el rechazo al DNU 846/24, que le otorga facultades al Gobierno y en particular al ministro de Economía Luis “Toto” Caputo, para renegociar la deuda externa y en moneda local sin pasar por el Congreso y sin cumplir las exigencias que fija la ley de administración financiera en cuanto a mejorar montos, plazos y/o intereses a favor del Estado (al menos dos de estas tres condiciones).
Desde la oposición plantean que esto debe discutirse en el marco de la Ley de Presupuesto-donde está incluida la misma medida. “Por eso también desde nuestro bloque vamos a pedir poner fecha concreta al tratamiento del Presupuesto. Porque no da lo mismo que haya o no haya un Presupuesto. El Congreso tiene una responsabilidad, el Gobierno también, pero por ahora no pareciera demasiado proclive a hacerlo”, advirtió Paulón.