Redacción Canal Abierto | A cuatro días del temporal que dejó a gran parte de Bahía Blanca y alrededores bajo el agua, 16 muertos y 95 personas sin localizar, aún hay vecinos que están siendo evacuados. Es el caso de varias personas mayores que viven en edificios del centro de la ciudad -una de las zonas más afectadas- y que están desde hace días sin suministro eléctrico.
Además, y a pesar de que en las zonas críticas (Ingeniero White, Boulevard y Saladero) el agua ha ido cediendo, todavía hay lugares con niveles altos, aunque ya sin riesgos, como es la zona de Las Quintas, o con hondonadas, como sucede en un sector del barrio 17 de agosto, o en Villa Hipódromo.
Así lo informó el intendente Federico Susbielles en una conferencia de prensa realizada ayer por la tarde en la que también le puso cifras a la magnitud de la catástrofe: “El 70% de los bahienses sufrieron daños graves”, estimó. En ese marco, también reconoció lo que vienen planteando muchos vecinos y referentes de organizaciones sociales, en relación a que hay lugares a los que todavía no pudo llegar la asistencia estatal directa.
En esa línea, repasó: “Venimos trabajando y en las dos jornadas en las que pudimos distribuir prácticamente lo hicimos a depósito vacío. Hemos logrado distribuir 100 toneladas de alimentos, 18.000 litros de lavandina, 1300 colchones y nos quedan 300 en stock”.
“En este punto –subrayó- quiero hacer una pausa para que comprendamos la magnitud de este desastre. Uno entiende el dolor y la angustia de los vecinos, estamos tratando de llegar y estar presentes en todos los rincones de la ciudad, pero está claro que las cifras de la que estoy hablando poco tienen que ver con poder cumplir con una ciudadanía que en más del 70% ha tenido daños graves, con muchas familias lo han perdido todo”.
De esta manera, dio cuenta del carácter insuficiente de los recursos humanos y materiales disponibles, entre los que se cuentan lo enviado por la provincia, las donaciones de particulares de todo el país que están “en proceso de llegada” y los magros fondos prometidos por el gobierno nacional. Ayer, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich dijo que se estaba evaluando brindar una ayuda directa a los damnificados, pero todavía no hay precisiones.
“Los vecinos y vecinas están desesperados”
En ese marco, vecinas y vecinos afectados por la inundación e integrantes de distintas organizaciones fueron muy críticos en relación a cómo se está manejando la asistencia social. Desde FM de la Calle, medio comunitario que viene recorriendo las distintas zonas afectadas, pusieron el foco en el criterio de distribución.
“Hoy estuve en seis casas distintas y lo que nos decían es ‘acá no vino nadie’. Siempre hay alguna salita cerca o algún lugar al que se puede ir a buscar ayuda, pero todavía no hubo una asistencia directa”, apunta la periodista Maia Dittler. Por ejemplo, “en la zona lindante al canal Maldonado donde hay casas a las que entraron hasta dos metros de agua, hay vecinos que todavía no habían recibido asistencia”, asegura.
“En Harding Green también está muy complicado y pasan cosas como que les están cobrando un paquete de velas $5000. Un robo”, señala. “En Tierras Argentinas y Puertas del Sur, que es donde funciona el vagón de (la organización social) La Poderosa, son las mismas vecinas que perdieron todo las que al otro día fueron a parar la olla, y han recibido muy poca asistencia”. Se trata de una zona –resalta- donde “se perdió todo porque han rebalsado todos los pozos sépticos”.
“Paso en el 2023 con el temporal del 16 de diciembre y vuelve a pasar ahora: es la organización popular la que viene a dar respuesta ante la demora de la organización de la ayuda estatal. Uno entiende que es una demora natural ante un desastre de esta magnitud, pero ya pasaron tres días y hay lugares a los que todavía no se ha llegado”. “Lo que vemos -sostiene la periodista- es que los vecinos y vecinas están desesperados y que la asistencia, por ahora, no alcanza”.
Por su parte, César García, referente social que coordina una de las redes solidarias con epicentro en el Centro Comunitario “La Esquina de Otto”, de Lavalle 543, también pidió que haya “un poco más de organización” desde el Municipio.
“Estamos en comunicación con ellos y con la provincia, y hasta el momento estamos en un tire y afloje con las cosas que nos piden en los barrios. Ni hablar con el gobierno nacional. Por eso, como dijo una vecina nuestra, es tiempo de correr los colores políticos y arremangarse, como está haciendo el pueblo bahiense’”.
Al panorama trazado por el intendente, García suma la situación crítica que se vive en Villa Evita, en Thompson, en Spurr, en Villa Esperanza, Villa Ferro, Villa Rosario, entre otros barrios periféricos; pero también, la de los vecinos de sectores medios y el de los comerciantes del centro. Son zonas que están “detonadas”, en las que gran parte de la gente “perdió todo”, explica.
Ante este panorama, “nosotros lo que planteamos es la necesidad de que haya un comité de crisis que integre a todos los sectores vivos que están en cada uno de los lugares”. Porque “si bien se han puesto a disposición el Ejército, la Marina, las fuerzas de seguridad, al municipio y a la provincia, los que conocen el territorio son las organizaciones vivas que están abajo y conocen la situación de cada familia”.
Portada/Galería: Gentileza FM De La Calle