Redacción Canal Abierto | Sergio Maldonado se presentó ante la Cámara Federal para argumentar su rechazo a que el espionaje del que fue víctima mientras buscaba a Santiago sea investigado por el mismo juez que fue apartado de la causa por maniobrar en favor de los gendarmes sospechados, favoreciendo versiones impulsadas desde Casa Rosada.
Se trata del juez federal de Esquel, Guido Otranto, que fue desplazado de la investigación por su falta de imparcialidad, ya que permitió durante la primera etapa que el gobierno nacional le maneje el expediente para proteger a los señalados por la desaparición del joven artesano.
El espionaje, realizado en el marco del denunciado Proyecto X, consistió en relevar los movimientos de Sergio Maldonado y su compañera Andrea Antico durante las actividades de búsqueda de Santiago, como así también monitorear a referentes de organismos de derechos humanos.
Sus abogados apelaron esa decisión y hoy fundamentaron ese rechazo en que la competencia territorial es de los tribunales federales de CABA, ya que las órdenes fueron impartidas desde el ministerio de Patricia Bullrich.
El abogado Matías Aufieri, representante de la familia Maldonado en este proceso, le explica a Canal Abierto los motivos que expusieron en el juzgado: “en primer lugar tenemos denunciados a funcionarios del Ministerio de Seguridad de la Nación, cuyo asiento es en la Ciudad de Buenos Aires, desde ese punto de vista la causa tiene que tramitar acá, más allá de que alguna acción circunstancial de estos funcionarios pueda haber sido afuera de la Capital, nosotros denunciamos que el espionaje es una política del Ministerio”, dice el letrado, que comparte el patrocinio junto a Liliana Mazzea y Myriam Bregman, y además agrega que “el tráfico de esta información obtenida ilegalmente, en lo que surge de la causa, se daba entre un centro de reunión de información de gendarmería en Neuquén, y el celular del jefe de gendarmería de la localidad de El Bolsón, dos ciudades ajenas al rango de actuación del juzgado de Esquel”.
La investigación del diario página/12 señala que “Gonzalo Cané, emisario del Ministerio de Seguridad de la Nación y que detenta el cargo de Secretario de Cooperación con los Poderes Judiciales, Ministerios Públicos y Legislaturas, entre otras maniobras para las que fue destinado al sur del país tras la desaparición de Santiago, se dedicaba a presentar escritos en la causa, solicitando que el peritaje de los celulares se limitara únicamente a la jornada del 1º de agosto en que Santiago desapareció tras una brutal represión de Gendarmería sin orden judicial”.
Pero no son las únicas explicaciones procesales que Maldonado y sus abogados llevaron ayer ante el magistrado: “todo ese intercambio (de llamadas) se deba a través de líneas de telefonía celular pertenecientes a Buenos Aires” dice Aufieri, que expresa plena confianza en los argumentos presentados porque, explica a este medio, “son muchos y contundentes, respaldados en bastante jurisprudencia. También expusimos que esta información surgió de la causa que se instruía en Esquel, toda esta actividad ilegal que nosotros denunciamos, sin que hubiéramos hecho la denuncia el juzgado tendría que haber tramitado una causa aparte por la posible comisión de estos delitos que surgen a la vista, y no lo hizo, entonces nosotros, mas allá de nuestra opinión sobre la competencia, vemos que no va a haber una investigación seria por parte de un juzgado que a esto ya lo dejo pasar”. En ese sentido, el representante legal de Sergio Maldonado confirma que: “adelantamos ante la Cámara y ante quien quiera oírlo que recusaríamos al juez Otranto”, en caso que la causa vuelva a sus manos.
La denuncia se presentó en octubre. Hasta hoy no se instruyó ninguna medida de prueba por la dilación que implica el conflicto de competencia. En los próximos 5 días hábiles la Cámara tendrá que responder la presentación que recibió ayer, que fue acompañada por Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo. Si acepta tendría que instruir la causa el juez Daniel Rafecas. De lo contrario, los denunciantes todavía tienen otras instancias recursivas disponibles.
“nosotros denunciamos que el espionaje y la desaparición son delitos totalmente autónomos, por eso no hay motivo para que tramite en el mismo juzgado, dado que incluso las víctimas en un delito y en otro son distintas, en el caso de la desaparición es Santiago, y en el caso del espionaje es Sergio y su familia” completa el abogado Matías Aufieri, que finaliza destacando que Sergio Maldonado continúa con “con mucha entereza, encarando todas estas luchas, no dudó en viajar para brindar su testimonio, con una gran moral”