Redacción Canal Abierto | Los docentes universitarios arrancaron el año rechazando la oferta salarial del 15% que el Gobierno de Macri intentó imponer a la mayoría de los sectores.
Una semana atrás, y luego de meses de reclamos, el Ejecutivo se dignó a convocar a una nueva reunión. El oficialismo no sólo no cumplió con las expectativas de al menos mejorar la propuesta. Todo lo contrario.
“Nos ofrecieron pagar un 4% en agosto y un 6 en noviembre que fue rechazado por todos los gremios. Pidieron un cuarto intermedio y volvieron con una oferta de 10,8%. O sea, al 5% que aplicaron en mayo, agregarle en agosto un 5,8%”, contó el titular de Conadu Histórica, Luis Tiscornia, quien calificó el encuentro como un fiasco.
A su vez, las gremiales exigen la devolución de unos 4 mil millones de pesos de recorte presupuestario para el sector y una ampliación del presupuesto para Ciencia.
En este marco, docentes de las universidades públicas de todo el país comienzan este martes la tercera semana de paro, medida de fuerza a la que ahora adhiere también Conadu. Convocan a una Marcha Universitaria Nacional para el próximo 30 de agosto.
Criminalización de la protesta
Entre abrazos simbólicos a universidades y la huelga, el cuatrimestre sólo arrancó con algunas clases públicas fuera de los establecimientos educativos.
En ese contexto es que la semana pasada la policía levantó una contravención contra Mónica Cragnolini, doctora en Filosofía, quien dictó una clase pública ante más de 70 estudiantes. Una de las mayores especialistas en Friedrich Nietzsche de la Argentina, la docente de la facultad de Filosofía y Letras de la UBA recibió el respaldo de los gremios.