Redacción Canal Abierto | Con los datos sobre Distribución del Ingreso del segundo trimestre que dio a conocer ayer el INDEC se confirma estadísticamente una sensación que se palpa en las calles: la desigualdad social creció y no tiene miras de detenerse.
Los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos indican que el 10% de los que más ganan concentran el 30,5% del total de los ingresos nacionales, mientras que el 10% más pobre percibe el 1,4%.
En dinero, el 52% de los trabajadores perciben ingresos de $10.000 por mes o menos, el 10% que más gana recibe entre $25.000 y $500.000 mensuales, y el 10% que menos tiene recibe entre $70 y $3.000 en un período similar. Es decir que la población más adinerada recibe 17 veces más ingresos que el sector más empobrecido.
Por su parte, el Coeficiente de Gini, que mide la desigualdad en una población –más igualitaria cuanto más cercano es a cero- fue el segundo trimestre de 0,428 puntos, frente al 0,427 de igual período del año pasado, cuando el sector más rico percibía 16 veces más que el más pobre. En otras palabras, la brecha entre ricos y pobres subió un punto durante el último año. Entre abril y junio de 2015 el índice llegaba a 0,410.
Mientras tanto, el Gobierno festeja cierta recuperación en la actividad económica luego de la caída estrepitosa del año pasado, pero el impacto de los presuntos brotes verdes no parece influir en la distribución del ingreso.