Redacción Canal Abierto | “Lavallén hizo con la pintura lo que Juan L. Ortiz hizo con las palabras, es que ambos artistas vienen de una provincia que tiene todo su perímetro acuático: literalmente, Entre Ríos. Este hecho genera una especie de dialogo cósmico, un orden visual regido por el fluir en tándem, de paños de cielo y paños de agua, y en esa sutil y cambiante relación se encuentra la poesía, fluye el río y fluye la pintura. Con la ayuda del formato apaisado como en el cinemascope, la escena tamizada por pantallas sucesivas nos incluye y nos deja atrapados y afectados por la imagen”, escribe Daniel Santoro sobre la nueva muestra del pintor Julio Lavallén que inaugura este sábado 29 a las 19 en Espacio Peces (Santa Elena 442, Barracas, CABA).
Lavallén titula su muestra Siempre estoy llegando, tomando la frase del tango Nocturno a mi barrio, cuya letra Aníbal Troilo escribió luego de una cura de sueño durante un período de internación. En ella expresa un viaje interior hacia sí mismo, al origen: “Alguien dijo una vez que yo me fui de mi barrio, pero cuándo, pero cuándo si siempre estoy llegando…”.
En ese sentido el historiador de arte latinoamericano y reconocido coleccionista Freddy Suárez Gutiérrez afirma en el texto de sala que “en este justo momento la vida de Lavallén da un giro sustancial, después de varios años en los cerros salteños vuelve a las orillas del río. Siempre está llegando a sus orígenes ribereños, recordándonos la famosa frase de la novelista estadounidense Toni Morrison que reza: El agua tiene una memoria perfecta, tanto así, que siempre trata de volver a su sitio inicial”.

La exposición reúne 21 pinturas de gran formato de su más reciente producción, centradas en el pensamiento del regreso a las fuentes. Para eso utiliza la metáfora tan conocida del agua y su permanente circulación y retorno, pero también recuerdos infantiles, paisajes de la infancia, la familia y los interiores privados donde cada individuo suele mirarse al espejo.

Lavallén, que alejado de las salas y museos de Buenos Aires desde hace años sostuvo una presencia continua de su trabajo en reuniones anuales en su propio taller porteño con seguidores, coleccionistas y colegas cercanos, realiza ahora en las dos salas principales de Espacio Peces un importante despliegue de sus obras recientes y convierte la Sala Azul en un espacio informal de proyección donde presenta un video de animación de los cuadros, que considera “un juego”, realizado con inteligencia artificial.
También se puede acceder a las obras y los textos de la muestra en el catálogo online




