Redacción Canal Abierto | El Gobierno nacional presentó el anteproyecto de Presupuesto 2018 que planea debatir tras las elecciones de octubre y dejó al descubierto cuáles van a ser algunas líneas directrices en materia económica.
Ajuste
La disminución del déficit fiscal en un 3,2% del PBI se presentó como el mascarón de proa del Ejecutivo a la hora de discriminar la asignación de recursos para el año próximo. Allí se observan las primeras alertas, sobre todo para 14 de los 20 ministerios que –según la optimista pauta inflacionaria del Gobierno- verán reducidas sus partidas presupuestarias. Desde Energía, el más perjudicado por la quita de subsidios, hasta Salud o Interior, todos contarán con menos dinero en comparación a 2017.
“En promedio, el oficialismo presenta un 16% de aumento del gasto. Pero al mismo tiempo preveen una pauta de inflación en línea con ese porcentaje (15,7%), aunque nosotros la estimamos en alrededor de un 20%”, señala en esta entrevista con Canal Abierto el director del IDEP.
No resulta inverosímil pensar en una predicción inflacionaria por encima de la estipulada en el Presupuesto, sobre todo cuando la prevista para 2017 era de entre 12 y 17% y terminaría resultando –según el cálculo de distintas consultoras y el propio INDEC- en aproximadamente un 24%.
“La realidad es que cuando no es a la baja, el gasto en promedio se estanca”, opina Fernández.
“Para tomar un ejemplo, la partida que el Gobierno utiliza como insignia para negar el ajuste es la de Servicios Sociales, donde figura un incremento del 21% que en términos reales –calculado a partir de la inflación oficial- sería de tan sólo del 4,8. El problema es que es insuficiente en un cuadro social como el nuestro, donde un tercio de la población está por debajo de la línea de la pobreza”, afirma.
Tarifazo
“La partida de servicios económicos (que incluye a los subsidios) viene con una disminución importante que se observa fundamentalmente en el sector energético (gas, luz, etc.). Plantean que en términos nominales –es decir, sin tomar la inflación- baja un 22%. Al aplicar la pauta inflacionaria que ellos plantean, la caída alcanzaría un 38. Sin embargo, al aplicar la pauta que realmente se espera, de un 20%, va a habar una baja real de lo destinado a subsidios de casi el 41%”, asegura el director del IDEP.
En relación al cumplimiento de los objetivos en términos de déficit, asume: “Con este recorte a los subsidios y a los gastos sociales ves una baja del déficit primario (son los recursos y gastos antes de pagar los intereses de la deuda). Cuando sumas 280 mil de pesos de pago de intereses de la deuda, el déficit financiero de este año es aún mas alto. Este proyecto de Presupuesto plantea que, aún con previsiones optimistas, la diferencia en la balanza comercial –guarismo que surge entre lo que se vende y lo que compra al extranjero- es negativa”.
Deuda
“La única partida que aumenta significativamente, midiéndola con la pauta inflacionaria que sea, es la de servicios de la deuda. Es decir, los intereses de la deuda”, señala Fernández, y detalla: “El incremento es de un 28% sin inflación, que en términos reales estaría rondando el 12% en términos reales”.
Del anteproyecto surge que el Gobierno de Macri plantea tomar 46 mil millones de nueva deuda en 2018. Con esto, desde la asunción de esta administración la deuda se va a ver aumentada en 120 mil millones de dólares.
“La partida de intereses de la deuda es mas alta que la que se destina a universidades, a Salud, Seguridad y Defensa, a vivienda, agua potable y alcantarillado”, asegura el representante del IDEP.
Entrevista completa:
Entrevista: Diego Leonoff