Redacción Canal Abierto | Los datos del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires sobre mortalidad infantil estimaron, para 2016, 9.9 defunciones cada mil bebés nacidos vivos. El dato cobra sentido en una línea de tiempo: representa un leve aumento respecto de 2015 y revierte una tendencia a la baja que llevaba cinco años consecutivos.
En lo que refiere a inseguridad, los números de la gestión de la gobernadora María Eugenia Vidal –la figura pública con mejor imagen de Cambiemos- no son mejores. En 2016, la tasa de delitos aumentó un 3,8%.
Los chicos
La tasa de mortalidad infantil es un indicador que refleja las defunciones de menores de 12 meses por cada mil nacidos vivos en el período de un año, y es considerada uno de los indicadores más importantes para evaluar la situación de salud de una población porque está determinada por condiciones que se relacionan entre sí (biológicas, demográficas, socioeconómicas, culturales, ambientales, etc.). La tendencia a la baja de este índice se mantuvo más o menos constante en los últimos 25 años, a excepción del período pos estallido social 2001-2003 o brotes de enfermedades infecciosas respiratorias como la gripe, ocurridos en 2007 y 2009.
Según un informe de los datos que realizó la Fundación Soberanía Sanitaria, “aun sin conocer las causas específicas de las muertes, el análisis realizado permite concluir que están vinculadas a un aumento de la desigualdad entre las distintas áreas geográficas de la provincia”.
“A su vez, la desigualdad podría estar asociada al empeoramiento de algunas condiciones sociales como el aumento de la desocupación, la suba de las tarifas de servicios básicos y la pérdida del poder adquisitivo del salario, que normalmente afectan de manera más rápida y exacerbada a los sectores sociales más desfavorecidos y vulnerables”, agrega.
Además de las políticas públicas enumeradas, otra de las variables que repercute en la variación de este índice es el Presupuesto nacional de Salud, que se redujo un 2,3% en 2017 y lo hará otro 1,94% el año que viene.
La inseguridad
Las estadísticas sobre inseguridad difundidas por el Ministerio Público bonaerense el último fin de semana arrojan que, en 2016, la tasa de delitos aumentó un 3,8%.
El total de crímenes denunciados en los 19 departamentos judiciales bonaerenses saltó de 719.728 a 746.952, y los rubros clave en los que la suba es más significativa son secuestros extorsivos, robos con armas y delitos contra la integridad sexual.
En lo que refiere a los delitos contra la propiedad, aumentaron los robos de 68.204 a 70.347; y los robos agravados por el uso de armas de 47.897 a 50.288.
En tanto, los secuestros extorsivos pasaron de 44 a 55 durante todo el año pasado.