Redacción Canal Abierto | Después de la toma del Ministerio de Economía que se extendió hasta la 1.30 de la madrugada de este miércoles, los trabajadores del Astillero Río Santiago firmaron un acuerdo con el gobierno de la Provincia de Buenos Aires.
Los funcionarios de María Eugenia Vidal se comprometieron a la entrega de insumos para continuar con la producción, hacer efectivos los meses adeudados en concepto de retenciones (cuotas sindicales, cuota de acción social, comercio y comedor), y suspender los futuros descuentos de vacaciones mientras dure la mesa de concertación, garantizando su funcionamiento hasta fin de noviembre.
“Nosotros lo tomamos como un paso más. Si bien ya hemos perdido la confianza en el gobierno, hace más de dos años y medio que venimos dialogando, y no hemos conseguido nada. También desconocen lo que firman, como el acta del 13 de septiembre con la firma del presidente de la empresa. El acuerdo paritario de 2016 tiene un acta homologada y sólo han cumplido una parte del mismo”, indicó Diego Seimandi, secretario de Acción Política de ATE Ensenada, y trabajador desde hace18 años en el sector de buques militares del astillero.
En medio de la toma, alrededor de las 22.30, se presentó un cura en el Ministerio. El miembro de la Pastoral se ofreció de mediador en el conflicto. Realizó el acercamiento con el gobierno, en el que se decidió enviar al ministro de Gobierno, Joaquín De la Torre, para negociar con los representantes de los trabajadores.
Esta negociación concluyó a la 1.30 con la redacción y firma del acta acuerdo, ratificando lo que ya habían acordado una semana atrás.
Esta mañana, el ministro de Economía de la Provincia, Hernán Lacunza, declaró ante los medios oficialistas que esto es una negociación de más privilegios para los trabajadores, que consiguieron durante la gestión anterior.
Esta campaña de desprestigio comenzó al mismo tiempo que el conflicto, en la que el principal ataque sigue siendo la falta de producción.
“El astillero se creó en el año 53. Hoy estamos trabajando sobre la construcción número 95, lo que habla de una construcción y media por año. En el único buque que nosotros tuvimos problemas fue en el que es para Venezuela, el Eva Perón, que está pronto a entregarse. Hace diez años se firmó el contrato,cinco años después llegó el acero. En el medio se murió Chávez. Un año y medio después nos entregaron los insumos. Pusieron de intermediario a Brasil, que no entregaba los planos ni los materiales. También se murió Néstor Kirchner”, informó Seimandi.
Y agregó: “Pasaron muchas cosas y nunca estuvo la decisión política de darle continuidad. Tuvo varios parates que no son culpa de los trabajadores, porque siempre que hubo materiales e insumos, el astillero trabajó”.
Por otra parte, hoy se sumaron a la jornada de lucha de los estatales en La Plata. “Decretamos paro y el astillero está movilizado”, dijo el secretario.
Sobre esta jornada, el sindicalista también declaró: “A nosotros nos queda seguir reclamando para que el astillero pueda seguir produciendo, porque de ninguna manera vamos a permitir que nos sigan descontando los salarios, que nos tengan metidos dentro de la fábrica pagándonos un sueldo mínimo y sin producir, que es a lo que ellos nos quieren llevar”.
También se refirió a la clara decisión política de esta gestión de gobierno de vaciar el Astillero Río Santiago. “Quieren vaciar la industria nacional. Nos desfinancian, salen a desprestigiarnos públicamente diciendo que somos deficitarios, no nos dan los insumos para poder producir y paralelamente compran buques militares afuera que este astillero tranquilamente podría fabricar”, sentenció Seimandi.