Por Pablo Bassi | Luego de dar marcha atrás con el recorte al adicional por zona desfavorable en la asignación por hijo, el ministro Dujovne incluyó en el proyecto de Presupuesto un ajuste del 25% en el plus patagónico de la AUH, discapacidad y ayuda escolar anual que empiece a ser percibida en 2019.
Además, el Gobierno prevé reducir en un 50% el plus austral para jubilados, pensionados y excombatientes de Malvinas. Si bien la medida no será retroactiva, fue disimulada de tal manera que buscará consolidarse por largos años.
Para ello recurrió a la modificación del artículo de una ley de 1972, que determinó el coeficiente de bonificación al sur del río Colorado. Si ahora es de 1,4, el gobierno quiere llevarlo a 1,2.
Se estipula que serán 4000 los trabajadores afectados el próximo año, si no media la unidad opositora que acorraló al Ejecutivo semanas atrás en su intención de poner un tope de $1578 a la asignación por hijo.
Aquella medida que afectó a la Patagonia y algunas ciudades del norte, alcanzaba a recortar hasta el 27% de un salario. Debió ser suspendida por la presión de gobernadores e incluso de diputados nacionales del radicalismo patagónico. Pero fundamentalmente, por las medidas de fuerza impulsadas por las centrales obreras y organizaciones sociales.
Ahora la decisión pareciera ser más inconmovible. Aunque todo puede ser. El twit que el 12 de septiembre lanzara el gobernador de Río Negro Alberto Weretilneck (“…no habrá modificaciones en las asignaciones familiares, ni del 40% de la zona desfavorable de los jubilados…”) pasará a la historia como un vaticinio de fuste o un ridículo posteo.
Todo dependerá de la capacidad de resistencia que tengan los gobernadores para evitar la transferencia del ajuste. Hasta hoy, las provincias perdieron el fondo sojero que las haría acreedoras de 20 mil millones de pesos por el resto de 2018 y una porción importante del reintegro a las exportaciones. A cambio, embolsarán en cuatro cuotas 4 mil millones de pesos.
Todavía sigue enroscada también la transferencia de los subsidios a servicios y transporte. Este dato no es menor: en la ciudad de Bariloche, por ejemplo, la empresa de transporte quiere llevar el pasaje mínimo de 20 a 25 pesos. Sin subsidios ser iría de 20 a 34 pesos.