Redacción Canal Abierto | “Yo estaba con un chico que de un día para el otro me dejó de ver. Me dijo que no me quería y no supe más de él. Estuve muy dolida por eso pero después de un tiempo conocí a otro chico y empezamos a salir. Cuando mi ex se enteró me empezó a amenazar. Primero dijo que me iba a lastimar a mí y después a mis amigas y familiares. Lo que me cuestionaba era que estuviera con otra persona y no con él”.
Este es el relato de una joven que participó del taller “Cortá a tiempo” impulsado por la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires. Reconocer y desnaturalizar situaciones de violencia en las relaciones de pareja es el objetivo principal de estos encuentros.
La problemática del amor romántico, los celos y los noviazgos violentos fueron tratados entre agosto y noviembre de 2018 en escuelas secundarias de gestión pública y privada, centros culturales y comunales, iglesias, clubes de barrio, teatros, ONGs y gremios.
En este período se llevaron a cabo 32 encuentros y participaron 1585 jóvenes de entre 15 y 18 años del interior provincial y el conurbano. Melina y Paz –coordinadoras del taller- explicaron: “uno de nuestros objetivos es que quienes vengan puedan identificar algunas conductas violentas dentro de sus vínculos personales. Intentamos que sea un espacio de reflexión y visibilización de prácticas que, hasta el momento, para muchas personas son naturalizadas”.
Desde el organismo también llevaron adelante una encuesta a más de 15.000 jóvenes. De allí se desprendió que 1 de cada 4 chicas reconoce haber vivido amenazas. El 63% es controlada por sus novios; el 53% fue acusada de ser infiel por celos; el 48% perdió contactos con amigas/os; el 33% dice que a su pareja le molesta que estudie o trabaje; al 30% le revisan el teléfono; y el 28% sufre violencia psicológica.
Los datos recogidos en la encuesta confirman al mismo tiempo los de la línea 144. Durante 2017, 8 de cada 10 llamadas fueron de personas entre 16 y 17 años.
Ante las intervenciones de los jóvenes en los encuentros, las talleristas desarrollan conceptos como el patriarcado y su construcción social, y las distintas formas de violencia de género y su naturalización. También explican de qué manera actuar ante una situación de violencia en la pareja, ya sea la propia o la de alguna persona cercana.
Los temas donde la participación aumenta se refieren a los estereotipos de género, las situaciones cotidianas de violencia, y los celos en la pareja. “Principalmente hacen mención a la posesión y los celos como una de las problemáticas que provocan el alejamiento de las amistades y del círculo de confianza”, comenta Melina.
“Muchas veces los celos son tomados como una forma de demostración de afecto, cuestión que se busca desandar durante la actividad, tanto a través de los materiales audiovisuales como con el uso de ejemplos -explica Alejandra López, directora del Observatorio de Políticas Públicas de la Defensoría-. Las relaciones violentas no se establecen de un día para el otro ni son secuencias lineales, sino que se van afianzando a partir de prácticas cotidianas que no se reconocen como violentas”.
Cualquiera puede encontrarse alguna vez en una relación violenta, sin importar la edad. Por eso, para denunciar y asesorarse, se puede llamar a la Línea 144, que está disponible las 24 horas.