Redacción Canal Abierto | Las autoridades del Banco Nación, que preside Eduardo Hecker, iniciaron la semana pasada una investigación por el préstamo de US$350 millones que la gestión anterior, a cargo de Javier González Fraga, le dio a la agroexportadora Vicentin. La cifra supera por mucho los límites que establece la normativa del Banco Central y representa más del 20% del patrimonio computable de la entidad oficial.
“Los pasillos del Banco Nación cuentan que en las múltiples reuniones que existieron con la empresa Vicentin para tratar de imponerle la necesidad de volver a encuadrarse en la normativa, frente a las exigencias de los funcionarios del banco, los dueños de la firma cruzaban del Banco Nación a la Casa Rosada para hablar directamente con la Presidencia. Eso luego se transformaba en un llamado desde la Presidencia de Mauricio Macri al ex presidente del Banco, González Fraga, quien se encargaba de llamar la atención a los funcionarios del banco para que se allanaran a los requerimientos de la empresa”, explica Claudio Lozano, actual director del Banco Nación y coordinador del Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPyPP), en el Primer Informe sobre la situación de la firma Vicentin.
La voluntad de financiamiento por parte del Estado macrista se explica como una devolución de favores: Vicentin, a través de sus subsidiarias, fue el principal aportante a la campaña presidencial de Mauricio Macri. Por tres diferentes empresas de su grupo (Oleaginosa Moreno, Algodonera Avellaneda y Frigoríficos Friar SA), realizó una donación total de $13.500.000, a razón de $4.500.000 cada una, entre el 6 y el 8 de agosto, pocos días antes de las PASO.
Dibujos contables, exportaciones sin declarar y una maniobra contable fraudulenta son sólo algunas de las estrategias que la administración Macri-Fraga garantizó a su principal aportante de campaña. En 2 minutos, desde Canal Abierto te damos los tips para juntarla en pala.
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