Redacción Canal Abierto | Corría la noche del sábado 27 de agosto en la esquina porteña de Juncal y Uruguay cuando a un agente de la Policía de la Ciudad se le cayó al suelo, en presencia de manifestantes que expresaban su apoyo a la vicepresidenta Cristina Fernández, un estuche con 28 balas de plomo y dos cargadores.
“Y pasa que la Ley de la Policía de la Ciudad es muy clara en este punto y establece en el Capítulo V, ‘Uso de la fuerza directa en concentraciones públicas’, que el personal policial no está autorizado a la portación de armas de fuego y municiones de poder letal. Esto demuestra una vez más la profunda ilegalidad de la que estuvo teñida todo el operativo policial”.
El mensaje fue emitido por la legisladora Ofelia Fernández a través de su cuenta de Twitter ayer por la tarde, luego de presentar la denuncia ante la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC) y de haber presentado un amparo para que el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta quitase las vallas que impedían el acceso a la zona y diera marcha atrás con el operativo policial.
Esta mañana, el abogado que la representa, Nicolás Rechanik, presentó la denuncia ante la Unidad Fiscal Especializada en la Investigación de Ilícitos relacionados con Armas de Fuego, Explosivos y demás Materiales Controlados (UFI-Arm) de Nación. “Hoy acompañé a los testigos a presentarse ante la UFI para que sea la Fiscalía la que investigue si efectivamente se convirtió algún tipo de delito. Ya les tomaron la denuncia y la declaración testimonial y ahora está en manos de la Justicia”, detalló en diálogo con Canal Abierto.
Los hechos del sábado
Según relatan los manifestantes que llevaron el estuche y los cartuchos a la legisladora, estos se le deslizaron a un oficial que estaba en primera línea cuando forcejeaba con un grupo. Ellos lo levantaron pensando que eran balas de goma pero tiempo después pudieron comprobar que se trataba de cartuchos de una pistola 9 milímetros, la reglamentaria de la Policía.
Lo que faltaba para confirmar la ilegalidad del operativo del sábado pic.twitter.com/uZVK47qbom
— Ofelia Fernández (@OfeFernandez_) August 31, 2022
“Son militantes de la zona de San Martín que se encontraban en la marcha y que al parecer en el momento en que se le cae lo levantan y cuando toman conocimiento de que Ofelia realiza el amparo en función del operativo de seguridad del sábado y de la presencia de la Policía de la Ciudad, deciden acercarse a ella —explicó Rechanik—. Es muy raro que después de los antecedentes del Indoamericano con todo lo que sucedió que vayan a las movilizaciones con armas letales. Las fuerzas de seguridad de la Ciudad como de la Nación pueden portar armas para cuidar la seguridad pública. El problema es que las utilicen en el marco de una manifestación, lo cual está expresamente prohibido”.
La prohibición consta en el artículo 99, del Capítulo V de la Ley que regula el Sistema Integral de Seguridad Pública de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el cual sostiene que “no está autorizado a la portación de armas de fuego y municiones de poder letal el personal policial que por su función en el operativo esté destinado a entrar en contacto físico directo con los manifestantes”.
“Yo creo que habiendo tanto material fílmico de la movilización del sábado que se está intentando reconstruir y existiendo otro tipo de denuncias en las cuales precisamente se denuncia el accionar del espionaje en contra de la Vicepresidenta, entendemos que va a ser un insumo importante para investigar todas estas causas que se concatenan, en función del operativo del sábado pasado”, finalizó el letrado.
Foto: Pepe Mateos (Télam)