Redacción Canal Abierto | A partir de las 0 horas de este lunes 29 de abril, los afiliados a la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) en el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) comenzaron un paro de 72 horas que paralizará las exportaciones de este sensible sector.
Como consecuencia de la medida, y mientras esté vigente, se suspenden todos los controles en las aduanas, puertos y aeropuertos, y todas las barreras de control zoofitosanitario del país dejan de funcionar.
El SENASA es un organismo descentralizado encargado de ejecutar las políticas en materia de sanidad y calidad animal y vegetal y de verificar la inocuidad de los alimentos de su competencia y el cumplimiento de la normativa vigente. También controla el tráfico federal y de las importaciones y exportaciones de los productos y derivados de origen animal y vegetal.
“Esta medida es extrema y seguramente acarreará pérdidas multimillonarias. El Gobierno es el único y exclusivo responsable. Si se aprueba la Ley Bases, el Estado será destrozado”, sostuvo Rodolfo Aguiar, secretario General de ATE.
“Los despidos de fines de marzo, mediante la metodología de no renovar los contratos, impactaron con fuerza en el SENASA, sobre todo en el interior del país. Más de 100 compañeros y compañeras fueron cesanteados. Como es de dominio público los contratos están todos en revisión durante los próximos tres meses”, explica en diálogo con Canal Abierto Jorge Ravetti, delegado General de ATE SENASA.
Las delegaciones de funciones que otorga el proyecto de la denominada ley Bases le permiten al Ejecutivo reestructurar cualquier dependencia pública, incluso achicar, fusionar y hasta disolver cualquier organismo. “En el dictamen de la Cámara de Diputados para el proyecto de la Ley Bases, algunos organismos fueron exceptuados de las delegaciones extraordinarias otorgadas al Poder Ejecutivo, SENASA no está. Si se aprueba, el Ejecutivo podrá fusionar, disolver, poner a la planta permanente en disponibilidad, dar pases de un organismo a otro, etc. Es nefasto”, argumenta Ravetti. “Estamos pidiendo que los diputados no aprueben la ley Bases y que al menos nos excluyan de los organismos sobre los que el Ejecutivo tendrá funciones delegadas”.
ATE sostiene que “la Ley Bases propicia una salvaje reforma del Estado y el desguace total del SENASA”.
“Las exportaciones se verán paralizadas y las empresas del sector agroalimentario que trabajen no tendrán los controles, van a hacer cualquier cosa”, sostiene el referente estatal.
Para ejemplificar la situación en las provincias, Ravetti nos cuenta que “en Chilecito, La Rioja, había un sólo veterinario para el control de la producción local y del intenso tráfico de la Ruta 40. Lo despidieron, no quedó nadie del SENASA en la segunda ciudad de la provincia”.