Redacción Canal Abierto | Manuel Adorni anunció este mediodía en su habitual conferencia de prensa un nuevo ataque contra las políticas de memoria, verdad y justicia.
El vocero presidencial informó que la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación será convertida en Subsecretaría, que “se va a recortar el 40% de la estructura y el 30% del personal”.
“Implica una ahorro de 9 mil millones de pesos anuales”, aseguró el funcionario, que no dejó pasar la oportunidad para burlarse de la destacada labor del organismo: “Ahora sí se va a encargar de garantizar todos los derechos humanos y no de defender a un sector ideológico partidario”.
Si bien el achicamiento del Estado es una política general del gobierno de La Libertad Avanza, el ataque a los sectores vinculados a los derechos humanos ha sido una obsesión de la gestión de Milei y Villarruel, con despidos en los organismos, en los Sitios y Espacios de Memoria, con cierres de áreas de investigación y el retiro de las querellas del Estado en los juicios por delitos de lesa humanidad, entre otros.
Por su parte, el Ministerio de Justicia emitió un comunicado precisando que el recorte implica “una reducción en un 50% de los cargos jerárquicos y direcciones vigente” y celebró haber despedido a 405 trabajadores.
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Además, el recorte implica la unificación del Archivo Nacional de la Memoria y el Museo de Sitio ESMA, que pasarán a ser unidades organizativas del Centro Internacional para la Promoción de los Derechos Humanos (CIPDH).
De los cerca de 2500 trabajadores que tenían la SDH y sus entes dependientes, solo quedaban 800, de los cuales 250 fueron despedidos este año. De efectivizarse el anuncio de hoy, habrá áreas que quedarán vaciadas completamente, otras sin directores y programas que deberán cerrarse definitivamente.