Redacción Canal Abierto | Ayer por la tarde, en vísperas del Día del Periodista, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) presentó un informe desolador para la profesión: casi la mitad de los trabajadores y las trabajadoras de prensa (47%) tienen salarios por debajo de la línea de pobreza.
Los datos surgen de la Encuesta Integral 2022 que realizó el gremio durante mayo sobre la situación socioeconómica de sus afiliados, de la que participaron más de 1.000 periodistas de empresas públicas, privadas y proyectos autogestivos; de radio, televisión, diarios y medios digitales, incluidos los grandes medios nacionales: América TV, Clarín, Olé, La Nación, Telefé Noticias, Ámbito, Télam, Infobae, Radio Nacional, Página/12, Perfil, El Cronista y la Televisión Pública.
Presentado en el Auditorio de la Cámara de Diputados de la Nación, junto a representantes de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN) y la denuncia de un estado de “periodismo en emergencia”, el relevamiento expuso que, del total de trabajadores de prensa de la Ciudad de Buenos Aires, sólo un 15% afirmó que el sueldo de su principal trabajo en prensa le alcanza para vivir.
Asimismo, el 54,8% afirmó tener otros trabajos por fuera del sector y entre quienes tienen más de un empleo en prensa (el 50,2%), el 79,2% respondió que se debe a que sus salarios no son suficientes para solventarse.
Periodistas pobres
Esta situación de pluriempleo generalizado va acompañada —y es explicada— por la precariedad en las condiciones laborales.
Según surge del estudio, entre quienes trabajan en el sector prensa escrita (diarios, portales digitales, agencias de noticias y revistas) los que cobran ingresos por debajo de la línea de pobreza llegan al 65%, mientras que en la categoría testigo en esa rama (“redactor/a”) alcanza el 70,5%. Por su parte, de quienes figuran como “colaboradores” y “freelance”, alrededor del 90% factura por debajo de la canasta básica.
A los que trabajan en radio no les va mejor: en las radios privadas, un 70,3% de las y los trabajadores perciben ingresos de pobreza.
La situación salarial mejora en TV: allí, es 12% el porcentaje de encuestados que se encuentra bajo la línea de pobreza, similar al del conjunto de los medios públicos. En esos lugares, coincidentemente, la presencia sindical es fuerte y con ella aumenta la posibilidad de discutir los sueldos en paritarias.
La cuestión se agrava en los medios cooperativos, autogestivos y populares, donde sólo el 43,4% de las y los trabajadores recibieron aumentos como actualización por la inflación, pero no como incremento real. De esta manera, y entre los que perciben ingresos en esta franja, sólo el 38% vio aumentos durante el último año.
“Lo que detectamos como rasgo distintivo de esta etapa es la recuperación del empleo pero mayor precarización: salarios por debajo de la línea de pobreza y contrataciones irregulares fuera de los convenios colectivos de trabajo. Lo que redunda en el pluriempleo, no como una opción vocacional sino como la única salida”, detalló Matías Cervilla, delegado en Clarín y secretario de Asuntos Profesionales del SiPreBA.
Contra la libertad de expresión
La pandemia también dejó su huella. Pese a que hace casi dos años se sancionó la Ley de Teletrabajo que regula la forma en la que se llevan adelante las tareas remotas —que incluso ha sido fuertemente criticada por precarizante por abogados laboralistas—, tampoco se cumple.
De acuerdo con la SiPreBA, un 68,7% de las y los trabajadores de prensa en territorio porteño realiza teletrabajo de manera permanente o mixta, pero sólo un 15,1% recibe algún tipo de pago extra por esta modalidad.
Se trata, además, de un sector altamente profesionalizado: el 64,2% de los trabajadores de prensa completó la educación superior. Formación que no recibe una remuneración acorde.
Desde el gremio también sostiene que este panorama de precarización extendida afecta directamente el derecho a la libertad de expresión y, más aún, el derecho a la información de la ciudadanía.
Además, un 14% aseguró haber sufrido agresiones o amenazas por su condición de periodistas.
Como consecuencia de todo lo anterior, el 50% de los participantes de la encuesta afirmó sufrir estrés por cuestiones laborales.
Estos alarmantes datos se dan el marco de un plan de lucha que ya incluyó paros en Clarín, Página/12 y Perfil, medios que representan al 67% del sector de prensa escrita, y que continuará con asambleas en las redacciones en el marco del 7 de junio y una caravana de protesta frente a los principales medios de la Ciudad el miércoles 8.