Redacción Canal Abierto | El viernes el presidente de Estados Unidos anunció en Miami, frente a los exiliados cubanos, el cese en la normalización de las relaciones bilaterales iniciada por Barack Obama y Raúl Castro en 2014. En principio, rige la prohibición de entablar negocios con los militares cubanos y se vuelven más estrictas las normas para viajar desde Estados Unidos a la isla.
Ayer el gobierno cubano emitió una declaración mediante la cual criticó las medidas y manifestó su intención de «continuar el diálogo respetuoso y la cooperación”. Además la respuesta oficial señaló que el mandatario norteamericano «está mal asesorado». El gobierno cubano calificó como “un retroceso en las relaciones” la decisión de Donald Trump y advirtió que Washington “recurre a métodos coercitivos del pasado, al adoptar medidas de recrudecimiento del bloqueo, en vigor desde febrero de 1962”.
Trump, le prometió a los exiliados en Miami (que lo apoyaron en campaña y le dieron su voto mayoritario en la elección) ayudar al pueblo cubano en la lucha contra su “brutal” gobierno. Además, desafió a Raúl Castro a presentar un nuevo pacto: “Retamos a Cuba a venir a la mesa con un nuevo acuerdo que esté en el mejor interés tanto de su pueblo como del nuestro”. Durante el acto estuvieron presentes disidentes y reconocidos activistas anti-castristas como Rosa María Pay y José “Antúnez” García Pérez, además de políticos locales y veteranos de la fallida invasión a la Bahía de Cochinos en 1961.
“A partir de ahora, estoy cancelando completamente el acuerdo unilateral con Cuba. No queremos que los dólares estadounidenses vayan a parar a un monopolio militar que explota y abusa a los ciudadanos de Cuba y no levantaremos las sanciones hasta que se liberen los presos políticos”, dijo Trump.
Canal Abierto conversó con la periodista Ivonne Albelo, jefa de corresponsales de Radio Rebelde, la tradicional emisora cubana fundada por Ernesto Guevara en 1958, que desde su cabina de trabajo en el centro de la Habana entregó a este portal un análisis de las políticas que la Casa Blanca le impone a Cuba.
¿Cómo recibieron los anuncios que realizó Donald Trump?
– El presidente norteamericano estaba en el teatro Manuel Artime en la ciudad de Miami, un teatro que lleva el nombre de un líder civil de la invasión mercenaria a Playa Girón, ya con esto Donald Trump demuestra una regresión histórica que ignora el contexto bilateral actual. En 2014 aquí mismo en La Habana, los jefes de Estado firmaron en la Cumbre de la CELAC su proclama de paz, y por supuesto nosotros consideramos que esto ha sido una vuelta a la retórica de la Guerra Fría, que parecía que había sido superada.
El presidente ha olvidado los términos de la Revolución Cubana, que es pacífica, una revolución solidaria y por supuesto que se trató de un discurso agresivo, inaceptable para los cubanos, porque el presidente enumeró una serie de imposiciones injerencistas sobre la forma de organizar la sociedad y el Estado cubano y puso eso como una condición para mejorar las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, mostrándose anclado en una política que fracasó durante los últimos 50 años, y que el pueblo cubano y la comunidad internacional han rechazado constantemente, en 25 oportunidades en la ONU han manifestado su posición contraria al bloqueo al pueblo cubano. En la votación del año pasado hasta Estados Unidos se abstuvo, como una manifestación de que ya había que ponerle fin al bloqueo, que ha afectado a todas las esferas de la vida de los cubanos.
¿Qué pierden Cuba y Estados Unidos con estas medidas?
– El New York Times estaba anunciando hace unos cuantos días sobre una regresión de la política de Estados Unidos hacia Cuba y a nuestro juicio, si esto se concreta, aislaría aún más a los Estados Unidos, perjudicaría sus intereses empresariales toda vez que esto podría costarle a la economía norteamericana 6 mil millones de dólares y perdería alrededor de 12.200 puestos de trabajo. Revertir el proceso con Cuba puede socavar los esfuerzos por combatir el tráfico humano, el comercio ilícito de drogas, el cyber delito y los fraudes de identidad, entre otras áreas de colaboración bilateral. Se habían logrado reactivar los vuelos directos, el correo postal, seguridad y programas de cuidado del medio ambiente. Las encuestas de opinión pública de los Estados Unidos en los últimos días respaldan el acercamiento bilateral entre la Habana y Washington, pero Trump decidió ignorar todo ese reclamo de la mayoría de las personas de su país que apuestan por el bienestar de ambos pueblos y por la normalización de los nexos entre nuestros países.
– ¿Qué esperan los cubanos como respuesta de su gobierno?
-¿Quién le dijo a Donald Trump que el pueblo y el gobierno cubano tendrían que hacer concesiones a nuestra soberanía y a nuestra independencia para tener relaciones normales con Estados Unidos? Desde el año 2014 el presidente cubano Raúl Castro dejó bien sentado que Cuba no iba a ceder ni un tantico así para establecer relaciones normales con el gobierno de Estados Unidos, y eso se ha mantenido.
El guion agresivo y el show montado con Trump fueron de pésima calidad, rompió las reglas de la diplomacia con su tono irrespetuoso, con su ataque permanente al gobierno cubano, al tema de los derechos humanos en un país como Cuba que constantemente ha brindado su ayuda solidaria al resto de los países.
-¿Cómo golpearía económicamente a Cuba este retroceso?
– Si se concretan las medidas a nosotros nos va a afectar porque el bloqueo nos está afectando desde 1961, nos afecta muchísimo y si recrudece por supuesto que económicamente nos va a poner en una posición muy difícil, pero tenemos la decisión de seguir adelante con nuestro proceso económico y social. Nosotros estamos desarrollando los lineamientos de la nueva política económica y social del partido y la Revolución, que se aprobaron el año pasado, como el desarrollo del trabajo por cuenta propia, que libera al Estado de obligaciones en sectores puntuales como el comercio; se está promoviendo la inversión extranjera, una tremenda oportunidad que pueden perder los empresarios norteamericanos de invertir en cuba. Pero los cubanos no aceptamos amenazas de ningún tipo, ya vivimos una historia en el año ´61 con Playa Girón y estamos dispuestos a no volver atrás.
Los términos de la nueva/vieja relación
- El giro de Estados Unidos de su política hacia Cuba incluye el mantenimiento del bloqueo comercial y financiero sobre la isla y el rechazo a las peticiones internacionales para que el Congreso lo levante, informó la Casa Blanca en un comunicado mientras Trump hacía su virulento discurso. El levantamiento del embargo sólo puede decidirlo el Congreso de Estados Unidos, controlado ahora por los republicanos en ambas Cámaras.
- La embajada estadounidense en La Habana permanecerá abierta.
- Las medidas adelantadas por el Jefe de Estado incluyen nuevos controles para que los estadounidenses que viajen a la isla lo hagan efectivamente en el marco de las 12 categorías ya establecidas por Obama (ninguna de las cuales incluye el turismo). Ahora, bajo el nuevo memorándum presidencial de Seguridad Nacional, el Departamento del Tesoro auditará las justificaciones para viajar, cuando antes el viajero sólo tenía que dar su palabra.
- Esta nueva política no revierte en los hechos el acercamiento iniciado por Washington y La Habana en diciembre del 2014, sino que endurece sus términos.
- Casi 300 mil estadounidenses visitaron la isla en los primeros cinco meses del 2017, lo que representó un crecimiento de 145 por ciento en relación al mismo período del 2016
- Empresas aéreas y de cruceros hacia Cuba hicieron millonarias inversiones en los últimos dos años para adaptarse al acercamiento entre los gobiernos.