Redacción Canal Abierto | Estados Unidos bloqueó virtualmente la adquisición de biodiesel argentino, tras aplicarle un arancel fluctuante entre los 50 y 64 puntos. La medida se tomó tras las denuncias de dumping que realizó la National Board Biodiesel (NBB), organización que agrupa a los productores estadounidenses, ante los precios de inserción de los combustibles argentinos e indonesios.
El Departamento de Comercio norteamericano fue quien emitió esta resolución provisoria a la espera de un fallo definitivo que podría darse en octubre. Cierto es que las ventas ya venían en baja desde abril, por lo que funcionarios del gobierno nacional estaban tratando de revertir esta tendencia, que creció un 60% en el primer cuatrimestre.
Los productores demandantes se basan en que las retenciones que se le aplican a la soja y al aceite derivado no son aplicables al biodiesel. Según ellos, es un fomento del Estado hacia los exportadores e incide en el precio de inserción en su mercado. En 2016, la Unión Europea ratificó una medida similar al validar el 24% arancelario al biodiesel argentino, que había impuesto en 2013.
El año pasado, la Argentina estuvo entre los cuatro productores mundiales de biodiesel y casi el 90% se exportó a los Estados Unidos. Estas ventas representan el 25% de las exportaciones argentinas a ese país y es uno de los factores claves para equilibrar la balanza comercial con el país del norte.
Una de las provincias más afectadas con la medida es Santa Fe, que produce el 80% de lo exportado a EEUU. Allí residen 18 de las 38 grandes plantas de producción argentinas, 7 de ellas en el Gran Rosario.
Luis Contigiani, ministro de producción de Santa Fe, explicó a radio Continental que nunca imaginó una medida semejante y se refirió a las negociaciones exteriores: “No tenemos que ser ingenuos, tenemos que tener una diplomacia más inteligente. Nosotros vamos a pedirle al gobierno nacional que emitan un reclamo para revertir esta medida que nos afecta directamente”.