Redacción Canal Abierto | En lo que se vivió como un gesto alentador, la primera sesión del año del Senado, en marzo, aprobó por unanimidad la ley de cannabis medicinal en todo el territorio nacional.
La norma, impulsada por distintas organizaciones de la sociedad civil –en su mayoría, madres y padres de chicos con afecciones neurológicas- significa la posibilidad de fabricar en laboratorios públicos el aceite cannábico, recomendado en tratamientos de enfermedades como epilepsia refractaria, Parkinson, VIH, cáncer, esclerosis, autismo, y artrosis; y su comercialización a un costo accesible.
Para que esto sucediera, el Poder Ejecutivo debía reglamentar la norma antes del 17 de julio, pero el plazo venció y la medida no llegó. Hoy, la Cámara de Diputados le reclamó que lo hiciera, en un texto que firmaron incluso los legisladores de Cambiemos.
Allí se pide al Gobierno «garantizar su efectiva implementación a fin de resguardar el derecho a la salud de los usuarios».
En su paso por Canal Abierto, la diputada Gabriela Troiano, cofirmante del proyecto de ley, y Juan Peñalba, papá de Violeta y miembro de CAMEDA (Cannabis Medicinal Argentina), explicaron los beneficios que el tratamiento opera en los pacientes y la urgencia de que la norma sea puesta en práctica.