Redacción Canal Abierto | En los bombos, en los rostros, en los carteles. En las Madres y en las Abuelas. En las hijos. En los nietas. Aquellos que para los genocidas «no están ni muertos ni vivos» están en todas partes. Cada Día de la Memoria, la Verdad y la Justicia desbordan de presencia.
Y este 24 de Marzo se multiplicaron para reclamar cárcel común y efectiva para los genocidas y repudiar las políticas de ajuste, represión y persecución política. Porque la expresión popular -ante el intento de invisibilización, de desprecio, de demonización- se hace cada año más masiva. Para recordar que no habrá olvido ni perdón, y que los pueblos no retroceden cuando gritan «Nunca más».