Redacción Canal Abierto | Enrique Viale es abogado y experto en cuestiones ambientales. Durante toda la semana, su teléfono sonó más de lo usual: el 27 de agosto, en el Boletín Oficial, se publicó el decreto 591 que modifica la legislación sobre el ingreso de residuos peligrosos.
La medida esconde diversas cuestiones álgidas que Viale sintetiza en una frase: “Es un claro ejemplo de flexibilización ambiental”.
“Han eliminado requisitos que existían, legislación vigente, para la importación de basura –dice-. Uno de ellos exigía un certificado de inocuidad ambiental y sanitaria emitido por el país de origen. Eso ha sido eliminado”.
“Argentina tiene 5.000 basurales a cielo abierto y sólo recicla el 20% de lo que podría reciclar. Tenemos un largo camino para hacer en nuestro país, por eso esto es más disparatado. Aun si no fuesen residuos peligrosos, es un disparate permitir que ingrese nueva basura sin tener resuelto esto” (Enrique Viale).
En diálogo con Canal Abierto, el abogado detalla que el Anexo integrante del decreto 181 que el reciente firmado por Mauricio Macri eliminó porque –alega- “deviene innecesario”, no lo es. “Han sido eliminados dos anexos que establecían una serie de sustancias que no se podían importar. Incluso residuos de determinadas actividades estaban expresamente prohibidos y eso también ha sido eliminado. Además, han introducido una serie de excepciones a la prohibición general de introducir residuos. Lo que tenemos ahora es un régimen mucho más liberal o abierto para importar basura”, detalla.
El comercio internacional de basura existe. Los residuos en cuestión son utilizados para algunos procesos industriales, y el reciclaje permite la reutilización de diversos materiales. Pero la Argentina no tiene para nada resuelto el tema, ni siquiera con la basura que el mismo país produce.
“Argentina tiene 5.000 basurales a cielo abierto y sólo recicla el 20% de lo que podría reciclar. Tenemos un largo camino para hacer en nuestro país, por eso esto es más disparatado. Aun si no fuesen residuos peligrosos, es un disparate permitir que ingrese nueva basura sin tener resuelto esto”, explica Viale.
Causas y consecuencias
Hasta hace poco, era China uno de los grandes compradores de basura a nivel internacional, y Estados Unidos era su principal proveedor: le vendía la mitad de sus reciclables. “Pero en enero de este año, China dejó de comprar basura, en parte por la guerra comercial con Estados Unidos aunque también explicaron que en los reciclables entraba cualquier tipo de basura porque con esto se abre una Caja de Pandora, ese es el gran problema”, agrega el abogado.
Una de las especulaciones es que este decreto del macrismo postrero está en consonancia con esta problemática estadounidense y pretende congraciarse. Otra, que responde a un pedido de ciertas empresas que abaratarían los costos con la importación, ya que la basura “es una especie de commoditie”. La última, que tiene relación con la ley que hace un año y medio consiguió aprobar Horacio Rodríguez Larreta para modificar la Ley de Basura Cero y permitir la incineración de basura. “Esas plantas, si bien no están construidas, en el futuro van a ser muy demandantes de ese material, lo que es un escándalo”, aclara el abogado.
Finalmente, los grandes perjudicados de la medida serán los recicladores urbanos, quienes verán fuertemente afectados sus ingresos porque el aumento de la oferta bajará, seguramente, el precio de los reciclables.
Foto: Eugenia Neme