Redacción Canal Abierto | En los últimos días estalló una campaña sucia contra la Comisión Provincial por la Memoria y contra su presidente, Adlofo Pérez Esquivel. Desde distintos medios de prensa se acusó al Premio Nobel de la Paz de materializar la llamada “CONADEP del periodismo” a partir de las pericias realizadas por el organismo sobre los elementos secuestrados al espía Marcelo D´Alessio en el marco de la causa en la que se investiga su participación en una red de espionaje paraestatal con fines extorsivos.
En la causa, que tramita en el Juzgado Federal de Dolores cuyo titular es Alejo Ramos Padilla, fue procesado el periodista Daniel Santoro, quien sabía contar con D‘Alessio como fuente en numerosas investigaciones.
Canal Abierto dialogó con Roberto Cipriano, secretario Ejecutivo de la CPM, quien explicó que la labor realizada por la institución radica en la naturaleza de la misma, especializada en análisis de materiales de inteligencia a partir de ser custodia del archivo de la Dirección de Inteligencia de la Policía de Buenos Aires (Dipba) desde 1998.
Sobre la campaña sucia fogoneada por distintos periodistas, Cipriano planteó que “hay una intencionalidad que algunos la inscriben en el marco electoral. Otros están abriendo el paraguas pro lo que pueda surgir en la causa. La verdad es que nosotros no conocemos toda la causa ni tenemos todos los elementos para saber si hay responsabilidad penal de periodistas o funcionarios judiciales. No nos corresponde hacer eso, porque esa es función del juez. Lo que hacemos nosotros es informar que en todas las conversaciones de D´Alessio, en los chats, las capturas de pantallas que tenía en sus dispositivos electrónicos, había gran cantidad de comunicaciones sobre diferentes temas con diferentes personas. Pero nosotros no decimos que Santoro sea responsable del delito o tenga que ver con algo. Solamente, de toda la documentación peritada de D´Alessio, vemos que aparecen determinadas personas. Luego el juez determinará si esa persona tenía contacto con D´Alessio por una actividad periodística y porque estaban cometiendo un delito juntos”.
Consultado sobre la implicancia que el peritaje de la CPM tuvo en la decisión de Ramos Padilla de procesar al periodista de Clarín, Cipriano aclaró que su trabajo “es una partecita pequeña del expediente, que es muy voluminoso. Tiene aportes documentales de gran cantidad de organismos, gran cantidad de testimonio. Este es un elemento más que el juez considera, pero no es el elemento central”.
Entre las personas que se sumaron a la ola de repudio del supuesto ataque al periodismo y la libertad de expresión, estuvo el mismísimo Presidente de la Nación. “Todavía no asumieron y ya empiezan a querer perseguir al periodismo, como la Comisión de la Memoria Provincial que vuelve a plantear que los periodistas que investigan están cometiendo un delito”, manifestó Macri.
“Le decimos al Presidente, como le presentamos en una nota hoy a la gobernadora Vidal explicándole la tarea que realizamos. Somos un organismo público de la Provincia de Buenos Aires y tenemos la obligación de dar explicaciones, ya que no hacemos nada que esté mal ni que sea secreto. Le aclaramos que no hicimos ningún tipo de control de los periodistas, que no hacemos control de la libertad de expresión y que estamos de acuerdo con la libertad de expresión. Todo eso le explicamos en una nota a la gobernadora. Y esa misma nota se la enviamos al presidente Macri”, respondió al respecto Cipriano.
Y agregó que “los poderes del Estado no pueden dejarse llevar por una campaña sucia lanzada por un periodista y enseguida se suben a decir cosas. La verdad es que correspondería que las máximas responsabilidades del país nos pregunten qué estamos haciendo y después emitan opinión. Opinar sin informarse es un problema, porque se termina formando parte de esta campaña sucia”.
El embate contra Pérez Esquivel tuvo su contraparte. Numerosas organizaciones manifestaron su apoyo al titular del Serpaj. “Hemos tenido una respuesta enorme de la sociedad, las organizaciones, están llegando adhesiones de todas las provincias. Son cientos de notas de organizaciones sociales, políticas, sindicales, religiosas… Estamos muy orgullosos y nos honra que Adolfo sea nuestro presidente. Es una persona intachable. Si hay alguien que ha defendido la libertad de expresión en Argentina toda su vida es Adolfo. Es un tipo que jugó su propia libertad y su propia seguridad. Una persona que estuvo presa, fue torturada y zafó de un vuelo de la muerte de casualidad. Es una persona incuestionable, entonces nos produce mucho enojo porque lo que hacen es trascender ciertos límites que por el bien de nuestra sociedad no deberían trascenderse”, concluyó Cipirano.
Entrevista: Manuel Rodríguez