Redacción Canal Abierto | El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, confirmó que el aumento a las jubilaciones correspondiente a marzo se aplicará mediante sumas fijas. Al suspender en diciembre el mecanismo de movilidad vigente, el aumento era del 11,56%, traducido en $1.631 para las jubilaciones mínimas, que actualmente están en $14.068.
La aplicación mediante sumas fijas implica un achatamiento de la pirámide de haberes. “Es un poco la idea que tenemos nosotros, tratar de ir generando equidad y levantando la vara. Que la base sea la que tenga más aumento. No puede haber jubilados con sueldos de $300.000 y otros de $14.000”, sostuvo Cafiero.
Por su parte, la abogada previsional, Silvia Arce, destacó: “Esta medida lo que intenta es bajar la inflación también. Pero achicar la pirámide de jubilaciones puede generar litigiosidad previsional y me parece que ya es tiempo de que los abuelos dejen de tener que recurrir a la Justicia. Hay que evaluar cuánto es el perjuicio de los jubilados en marzo cuando esté decretada la medida. Va a ser por decreto en marzo y en junio y durante esos meses se va a estudiar la nueva fórmula”.
Si bien la suspensión de la fórmula despierta incertidumbre en toda la masa de jubilados, que son más de 7 millones de personas, la suma fija representa una política que principalmente beneficia al segmento más bajo. Con la fórmula anterior, el incremento esperado para el primer semestre iba a ser del 28%. Según el jefe de Gabinete, con el aumento que se plantea, las jubilaciones más bajas “cobrarán más que con la fórmula vieja”.
Lo ideal en este escenario hubiera sido suspender la fórmula de actualización teniendo otra ya lista, y que los aumentos a los jubilados no dependan de un decreto del Ejecutivo. En este sentido, mientras se trabaja en esta nueva actualización, Arce planteó el principal punto a tener en cuenta.
“Con el nivel de inflación que tenemos hoy, es importante que los jubilados al menos tengan una cláusula gatillo que, en caso de que la fórmula que decidan vaya por inflación, sea por inflación. Porque el problema mayor que tenemos como país es que en los últimos dos años estamos superando el 100% de inflación. Si el jubilado cobra por debajo de la inflación, nunca va a recuperar su poder adquisitivo”.
Otro problema que afecta al bolsillo de los abuelos es el precio de los medicamentos. “Una medida importante que se está esperando es que al menos los jubilados que cobran la mínima tengan el 100% de cobertura en medicamentos. Esto fue una propuesta de campaña y entendemos que lo están trabajando y hay que darles un par de semanas más para que esto se haga efectivo”, resaltó la abogada.
Mientras esto se define, Arce destacó las medidas efectivas que se tomaron para asegurar un buen verano para los jubilados: “La suspensión de pagos de los créditos Argenta durante enero, febrero y marzo; la baja del interés de estos créditos en un 12%; la redistribución de las cuotas que no se pagaron en los meses siguientes; los bonos, y la devolución de estos bonos que las entidades privadas les sacaron en diciembre”.