Redacción Canal Abierto | Preocupados por la actitud del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires frente al manejo de la pandemia y la vuelta a las aulas, un grupo de familias autoconvocadas presentó un amparo colectivo frente a la Justicia porteña para reclamar por la no obligatoriedad de las clases presenciales durante la continuidad del virus, tal como sucede en otros países de la región.
“Entendemos que esta situación epidemiológica no habilita a la presencialidad. Estamos en un momento pandémico muy álgido, con mucha circulación del virus y sus nuevas cepas. Esto sumado a que no hay infraestructura en las escuelas públicas para amparar a los niños y niñas que están volviendo”, explica una de las madres, Carolina Fabrizio.
Lo que buscan con el amparo presentado es que las familias puedan optar porque sus hijos continúen recibiendo educación remota y virtual en sus casas. En este sentido, Fabrizio resaltó: “Tampoco hay inmunización. La mayor parte de los docentes no están vacunados y para los niños ni siquiera las hay. Pero la realidad es que las escuelas se han abierto y muchas familias han expresado que quieren mandar a sus hijos e hijas. Lo que nosotros pedimos es que no sea obligatorio porque ha habido varios aprietes y amenazas de distintas instituciones con quita de vacantes, de becas, y se ha amenazado con hacer intervenir a minoridad alegando deserción escolar con lo cual muchas familias están muy asustadas y no quieren elegir entre el derecho a la educación y el derecho a la salud y a la vida. Entendemos que ambos deberían ser resguardados de igual manera”.
Lo cierto es que el coronavirus ya lleva más de un año circulando en el mundo y aún con todos los pronósticos a mano, las escuelas no sufrieron modificaciones de ningún tipo. “No sólo no hicieron ninguna reforma edilicia ni acondicionamiento en infraestructura, sino que redujeron el presupuesto educativo. Nunca antes visto que en una situación de pandemia en la cual la educación debería ser una prioridad, no sólo no lo ampliaron si no que lo redujeron en millones”, destacó la integrante del colectivo de familias.
Además, ya en un contexto pre pandemia, eran las cooperadoras quienes se hacían cargo de la compra de elementos e insumos de limpieza para asegurar la higiene en las aulas para los niños y niñas de la Ciudad.
De momento, la causa es llevada adelante por el Dr. Hernán Mirasole, de la agrupación Nace Un Derecho, y se tramita ante el Juzgado CA y T Nº 13 de CABA. Hasta ahora, las familias no han tenido novedades de avances, y tampoco recibieron noticias por parte del Ministerio de Educación de la Ciudad.
“Es lamentable que otras cuestiones como escándalos mediáticos se resuelvan rápidamente en la Justicia con intervenciones rápidas y eficaces, y a un tema como este no se le dé curso inmediato”, finalizó Fabrizio.