Redacción Canal Abierto | Tras años de lucha y de búsqueda de un empleo digno, Karen Onzari y Giuliana Lescano, dos mujeres trans, ingresaron a trabajar a la Fábrica Militar de Fray Luis Beltrán, en Santa Fe.
Su ingreso se enmarca en el cupo laboral trans que establece el Decreto 721 del Ejecutivo nacional y de un reclamo persistente del gremio ATE Rosario.
“Me siento dignificada, tener un trabajo digno para mí es lo mejor”, sostuvo Karen, de 45 años, quien comenzará a trabajar en la confección de chalecos de protección para las fuerzas de seguridad al igual que su compañera.
Ella se perfeccionó en corte y confección como forma de escapar al trabajo sexual, forma de ganarse la vida a la que la sociedad empuja, casi de forma excluyente, a la población trans. “Me preguntaron en ATE Rosario qué era lo mío y yo les dije: hice esto, lo del taller. También les dije que sé de peluquería, sé un montón de cosas, pero lo que más me gusta es esto. Entonces, salió esta propuesta, que podría estar dentro de la Fábrica Militar, donde se arman los chalecos y para mí fue algo nuevo”, detalló.
“Imagínate, significa mucho, mucho, mucho porque es la posibilidad que todas las trans, todas, estamos esperando. No creo que no haya nadie en el colectivo que no quiera la oportunidad de demostrar que podemos hacer otra cosa, y que estamos capacitadas para aprender lo que sea necesario, sólo hace falta que nos den esto que nos están dado ahora”, sostuvo Giuliana, de 47 años.
Dos triunfos juntos
La victoria llegó de la mano de otra: el retorno de 22 personas desplazadas durante el macrismo, con los que suman 40 los puestos recuperados en el último año y medio, una lucha que viene encabezando ATE Rosario, conducido por Lorena Almirón, la primera mujer en ser secretaria general de la seccional.
“Desde nuestras políticas gremiales impulsamos la justicia social y la equidad desde hace siglos, y sobre todo cuando asume Lorena como secretaria general. Una de las bases es la diversidad sexual y trabajar profundamente sobre estas políticas –sintetizó la secretaria de Organización de la seccional, Liliana Leyes–. Lograr que el cupo laboral trans se dé hoy en un lugar histórico como Fábrica Militar nos pone muy felices y nos desafía a seguir trabajando”.
Informe: ATE Rosario