Canal Abierto Radio | Durante la Semana de la Memoria comenzó la campaña Tenés una historia, tenés un derecho organizada por la Unidad de Casos del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) destinada a jóvenes que tienen abuelos y abuelas desaparecidas por el terrorismo de Estado entre 1974 y 1983.
“En los últimos años hemos tenido un acercamiento al equipo más que de hijos y hermanos de las personas desaparecidas, de las generaciones más jóvenes: nietos, sobrinos, sobrinos nietos, etc. Entonces la idea es poder interpelar a esa franja de personas que saben que tienen un familiar desaparecido pero que no conocen dónde está ese cuerpo”, sostuvo Virginia Urquizu, coordinadora de la Unidad de Casos del EAAF, en comunicación con Canal Abierto Radio, resaltando que “muchas veces, esos jóvenes son los que movilizan al resto de la familia a donar la sangre”.
La antropóloga, señaló que al ser voluntaria la decisión de dar una muestra de sangre para la identificación de los 600 restos exhumados y resguardados por el EAAF en los últimos más de 30 años, puede suceder que “el hijo o hija de la persona desaparecida ya no están o no quieren dar su muestra de sangre”, en ese caso “podemos saltarnos directamente esa generación y tomar esa muestra de sangre con ese joven que nos puede dar información sobre qué otros posibles donantes habría en la familia”, explicó.
Si tenés un familiar desaparecido, tenés derecho a saber si su cuerpo fue encontrado.
«Sos parte de lo que soy» es el video que convoca a familiares de personas #desaparecidas entre 1974 y 1983 a contactar al EAAF al 0800 3453 236.
👐Sumate y compartilo.👐#Argentina #24M #Lesa pic.twitter.com/tseIPeMqoW
— Equipo Argentino de Antropología Forense (@eaafoficial) March 23, 2022
La importancia es por el derecho a la identidad pero también reconocer esos cuerpos tiene un peso en los juicios por delitos de lesa humanidad: “Esto tiene obviamente un efecto en las causas judiciales, nosotros trabajamos como peritos de la Justicia. En lo que tiene que ver con una resolución de identificación somos la parte técnica que lleva a cabo las pericias para llegar a eso, pero en última instancia quien identifica a esa persona es la Justicia por medio de una resolución judicial, lo que pasa a ser una prueba en un juicio”.
“Al haber una identificación esa persona ya deja de ser una persona desaparecida pasando a ser una persona asesinada. La figura cambia y termina siendo una prueba del delito que se cometió, porque en una pericia antropológica uno puede ver no solamente características físicas sino si pudo haber algún tipo de lesión y en qué momento”, aseguró Urquizu.
Desde mediados de los 80 hasta la actualidad el EAFF exhumó restos de personas que habían sido víctimas de desaparición forzada en diferentes puntos del país y en otros lugares del mundo, en diferentes contextos, cementerios con enterramientos sin nombre y entierros clandestinos. Según informaron, llevan alrededor de 1400 cuerpos exhumados con técnicas propias de la antropología forense, de los cuales 800 fueron identificados por lo que quedan 600 sin identificar de los que ya realizaron un perfil genético. “Solo nos falta la contra parte de información que nos aporte el/la familiar”, expresó la antropóloga.
Asimismo, explicó que “todos tenemos una información genética única pero que puede ser rastreada en la familia. Los restos óseos la tienen y es lo que va a ser comparado con la muestra de los familiares y siempre aspiramos a tener más de una muestra de sangre por grupo familiar”.
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Para sumarse a la Campaña por la Identidad, la Memoria, Verdad y Justicia, podes acercarte a las oficinas en la ex ESMA, enviar un mail a iniciativa@eaaf.org.ar, llenar un formulario en la web, redes sociales y/o por línea telefónica 0800-345-3236.