Por Pablo Bassi, desde Bariloche | Las organizaciones sociales, políticas y sindicales que convocan a la Séptima Marcha por la Soberanía se movilizarán este martes al Centro Cívico por las calles céntricas de Bariloche y, desde allí, se dirigirán al paraje El Foyel, 75 kilómetros al sur, donde nace el Camino de Tacuifí, una de las dos vías que desembocan en Lago Escondido a metros de la mansión del empresario inglés Joseph Lewis. Ese sendero, que se recorre en auto en 30 minutos, se encuentra enrejado a pesar de un fallo que ordena la accesibilidad pública al lago.
Otro grupo de más de sesenta personas provenientes de once provincias partió el sábado desde la Chacra Warthon en El Bolsón. Caminarán varios días por un sendero de montaña, la otra vía para llegar a la costa del lago. FIPCA, una de las organizaciones convocantes, presidida por Julio Urien, informó que la policía de la provincia de Río Negro los escoltará solo hasta el refugio Los Laguitos, poco más de la mitad del recorrido, y la responsabilizó de cualquier agresión eventual. El año pasado, durante la sexta edición, 40 personas armadas impidieron el paso de los marchantes a la altura de Lago Soberanía. El hecho es investigado por el juez federal Ariel Lijo.
Séptima Marcha al Lago Escondido
Polémica decisión: La Policía de Río Negro no escoltará a la columna de montaña durante todo el trayecto
La policía de la provincia de Río Negro no escoltará a la columna de montaña durante todo el trayecto de la travesía. pic.twitter.com/fKqJqjno12
— FIPCA (@FIPCAok) January 29, 2023
“Después de los pronunciamientos judiciales, entendemos que hay que apuntar a la provincia como responsable de no abrir el acceso al Lago Escondido”, dijo al diario Río Negro Rodolfo Aguiar, secretario adjunto de ATE. “Está claro que la gobernadora Arabela Carreras y Juntos Somos Río Negro son quienes permiten que en el país exista un Estado paralelo con sede en nuestra provincia. Son los que impiden que se pueda ejercer nuestra soberanía argentina sobre el lago”.
Además de FIPCA, convocan a la marcha la CTA Autónoma, la CTA de los Trabajadores y más de 20 organizaciones.
En septiembre pasado, la Cámara de Apelaciones en lo Civil de Bariloche confirmó la sentencia de 2013 del juez Civil Marcelo Cuellar, que ordenó al Estado provincial a realizar los trabajos necesarios para garantizar el tránsito a Lago Escondido. Esa decisión fue apelada por el Ministerio Público Fiscal de Río Negro, y la causa -que lleva 18 años- fue derivada al Supremo Tribunal de Justicia de la provincia.
Por otro lado, en octubre pasado la Cámara de Casación Penal cerró por prescripción la causa que investigó la compra irregular de tierras en zona de frontera que comprende la estancia Lago Escondido. La medida lleva la firma de Carlos Mahiques, Liliana Catucci y Guillermo Yacobucci, y confirmó el sobreseimiento de todos los imputados. Mahiques fue uno de los magistrados involucrados en el supuesto chat de funcionarios judiciales y ejecutivos y autoridades de Clarín que viajaron a Lago Escondido.
“No veo a porteños que venimos a invadir. Veo federalismo, unidad, organización, a argentinos preocupándonos por problemas de todos los argentinos”, señaló Alejandro “Vikingo” Meyer, integrante de FIPCA, durante una conferencia de prensa ofrecida días atrás en Bariloche.
“Veo a gente de la CTA Autónoma, de los Trabajadores, de la CGT, hombres y mujeres provenientes de Misiones, Corrientes, Córdoba, Santa Fe, Provincia de Buenos Aires, CABA, Mendoza, San Luis, Neuquén, Chubut y Río Negro”, precisó.
Junto a él se encontraban el médico sanitarista Jorge Rachid, el cura en opción por los pobres Francisco “Paco” Olveira y el economista y ex titular de la UIF (Unidad de Investigación Financiera) José “Pepe” Sbatella.
“Lewis tiene tres estancias que ponen en peligro la integridad territorial de la Argentina: una en la frontera comprada fraudulentamente a nombre de Nicolás Van Ditmar (lugarteniente de Lewis); otra en Sierra Grande con una pista de aterrizaje cuya extensión es similar a la del aeroparque de Buenos Aires; y la otra en Punta de Magallanes, en la Patagonia austral”, precisó.
En diciembre pasado, Juan Grabois y un grupo de militantes del Frente Patria Grande sortearon la reja al inicio del Camino de Tacuifí e ingresaron en camionetas hasta llegar a la costa de Lago Escondido. Allí se hizo presente la policía provincial y personal de la estancia, con quienes mantuvieron un altercado. Al día siguiente, abandonaron el lugar.
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