Redacción Canal Abierto | El radical Alfredo Cornejo volverá a gobernar la provincia de Mendoza, tras el triunfo de la lista de Cambia Mendoza que llevaba la fórmula que comparte con Hebe Casado. La boleta del oficialismo fue elegida por el 39,5% de los votantes.
El segundo lugar fue para La Unión Mendocina, fuerza fundada por el ex intendente de Luján de Cuyo Omar Demarchi tras su alejamiento de Juntos por el Cambio. La fórmula que integraba con Daniel Orozco se alzó con el 29, 67% de los sufragios.
Si bien se mantuvo la tendencia marcada en las PASO y la diferencia fue holgada, el oficialismo perdió 10 puntos respecto al porcentaje obtenido en las primarias. El 11 de junio, la sumatoria de votos que obtuvieron Cornejo y lista que encabezaba su contrincante interno, el actual candidato a vicepresidente de Patricia Bullrich fue 49,5%.
La Unión Mendocina no sólo incrementó su porcentaje al subir de 23,32% a 29,67%, sino que recortó la distancia con el primer lugar. En junio, esta había sido de más de 25 puntos y ayer fue de 10. Queda para el terreno de la interpretación el peso que pueda haber tenido su acercamiento a La Libertad Avanza, triunfadora en la provincia en las primarias nacionales.
El podio lo completó Elegí Mendoza, identificado con el oficialismo nacional. El binomio Omar Parisi-Lucas Llardo cosechó el 14,74 de los votos. La lista se completó con el Partido Verde, cuya fórmula Mario Vadillo-Emmanuel Fugazzotto obtuvo 11,86 y el Frente de Izquierda y de Trabajadores – Unidad por el que Lautaro Jiménes y Natalia Barbeito se anotaron con el 4,23.
La participación se mantuvo acorde a la de las PASO, 68,2%, y el voto en blanco fue de 4,8%.
Un ganador, dos celebraciones
“Es un honor haber sido el gobernador de la provincia y volver a serlo por el voto popular de los mendocinos. Es un honor personal, me llena de orgullo y me genera compromiso, mucho más del que ya tengo por el servicio público al que amo”, agradeció Cornejo al confirmarse el truinfo.
Como lo hizo los últimos dos domingos en Santa Fe y Chaco, la candidata presidencial Patricia Bullrich se subió al escenario para intentar apalancar una campaña que no viene siendo auspiciosa. Su discurso volvió a tópicos de su campaña. Prometió que “vamos a ir bajando impuestos de manera responsable” en la semana en la que el partido que representa votó en contra de la eliminación de la cuarta categoría.
Resaltó “este ejemplo que tiene Mendoza que tiene boleta única y ficha limpia se extienda en todo el país”, planteó “que las provincias que producen reciban incentivos por aquello que producen y no solamente le saquen una parte para aquellas provincias que sólo pagan sueldos” y sostuvo que “vamos a luchar fuerte contra la inseguridad y el narcotráfico”, pero sin hacer mención a la cárcel de máxima seguridad que llevaría el nombre de la vicepresidenta.
A pesar de no haber triunfado, en el centro de campaña de Demarchi se celebró la buena elección que consideran haber hecho. “La Unión Mendocina tiene sólo 160 días y no es el cambio de nombre de un partido preexistente. Es el nacimiento de una nueva fuerza que ha llegado a la provincia de Mendoza para instalarse con fuerza. Nuestro punto de partida es nada más y nada menos que el 30% de los mendocinos que nos han acompañado en este inicio”, expuso al momento de reconocer de la derrota y agradecer a la militancia.