Redacción Canal Abierto | Fue heladero, peón de obra y, hasta hace poco tiempo, recolector de basura. De joven tuvo que salir a hacer venta ambulante para ayudar ayudar a su madre, quien durante años trabajó como empleada doméstica en la casa de una de las familias más encumbradas de Jujuy.
El hoy diputado nacional Alejandro Vilca es una rareza entre sus pares, caracterización que dice mucho de la conformación de una Cámara legislativa que por definición debiera ser la representante directa del pueblo argentino. De hecho, sobre la primera impresión que tuvo al ingresar al Congreso, recuerda: “no podía creer tanta ostentación y riqueza, el fuerte contraste con los barrios humildes de mi provincia”.
“Crecer rodeado de pobreza te hace entender mejor la amistad y el compañerismo, pero también sufrir en carne propia la injusticia que me llevó a cuestionar cómo funciona nuestra sociedad”, asegura en esta entrevista con Canal Abierto.
Fue hacia finales de los 90, cuando trabajaba mientras estudiaba arquitectura en la Universidad de San Juan, cuando se puso en contacto con las ideas socialistas y anticapitalistas que años más tarde lo llevarían a la legislatura provincial y desde 2021 al parlamento nacional.
El año pasado el 25% de los votos jujeños lo convirtieron en una de las sorpresas electorales, junto al ascenso de neoconservadores y ultraliberales como Javier Milei. “Son las fuerzas de centro las que nos llevaron a esta situación, no hay lugar para medias tintas”, analiza al respecto el legislador nacional.
Sobre el Gobierno, apunta: “está cada vez más presionado por derecha, una muestra de ello es que haya cedido por completo el manejo del plan económico al FMI”.
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La rebeldía… ¿por derecha o por izquierda?
Días atrás el economista que se autopercibe “liberal libertario” realizó el cuarto sorteo de su dieta como diputado nacional, unos $357.721, acción que desde un primer momento generó una fuerte polémica. Por un lado, de quienes aducen que la rifa tendría como objetivo velado hacerse de una base de datos con fines electorales; pero también de aquellos que lo interpretan como un gesto de demagogia que atenta contra la idea de que todo ciudadano, hasta el más humilde, tiene derecho a acceder a las más altas magistraturas.
Si bien es cierto que el FIT salió a cuestionar la rifa y que el espacio está en las antípodas ideológicas del sector que este representa, el dirigente jujeño no duda en coincidir respecto a la existencia de esa suerte de casta política a la que constantemente apela Milei. Es a cuenta de estas críticas que los legisladores del Frente resolvieron no percibir estipendios por encima de lo que cobrarían en sus respectivos puestos de trabajo -en el caso de un recolector de residuos de Jujuy, en torno a los 70 mil pesos- o el equivalente a un salario docente promedio: “hay una casta con privilegios, que vive como ricos y trabaja para los ricos”.
“Es un momento de confusión y crisis en el que la derecha intenta fortalecer el poder de los sectores empresariales”, reconoce Vilca. “Nosotros, en cambio, apelamos a otros valores: creemos que la única manera es organizando al pueblo, combatiendo la indiferencia y construyendo otra sociedad en la que las riquezas naturales, la tecnología y la ciencia se estén en función de las necesidades sociales y no de las ganancias”.
Sobre los debates de coyuntura
“No es que no importe quienes y cómo elijan o destituyen a los jueces, pero el debate sobre el manejo de la casta judicial está muy lejos de necesidades urgentes como bajar la inflación”, opina en relación a la disputa que en las últimas semanas mantienen el oficialismo, la Corte Suprema y Juntos por el Cambio respecto de la composición del Consejo de la Magistratura. “Sucede lo mismo con la Ley de Alquileres, un tema imposible de pensar sin en paralelo proyectar planes de vivienda para los sectores populares”.
Represión y extractivismo en Jujuy
En lo que se evidencia como una nueva oleada de persecución a referentes sociales y opositores por parte del gobierno jujeño, en las últimas semanas fueron apresados los dirigentes Sebastián Copello y Juan Manuel Chorolque. “Es muy fuerte la persecución en Jujuy, no hay sindicato que no tenga causas abiertas”, afirma sobre la política de judicialización de la protesta social que desde hace años impulsa el gobernador Gerardo Morales. “En Buenos Aires se presenta como un dialoguista dentro de Cambiemos, pero no es casual que en la provincia lo `el emperador´”.
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“Estamos sufriendo un saqueo de nuestros recursos naturales sin que las grandes mayorías gocen de casi ningún beneficio: un ejemplo es el litio de Jujuy, extraido por grandes multinacionales que en regalías pagan prácticamente el 1% de lo que se llevan”, apunta Vilca. “A esta lógica extractivista se suma la contaminación y el impacto social, por eso cada vez son las más poblaciones y comunidades originarias que se rebelan”.
Proyectos propios
Entre las iniciativa propias que destaca el diputado se encuentra el proyecto para una Ley Interzafra que permita dar una solución a los trabajadores temporarios del tabaco, el citrus y el azúcar.
También adelantó que buscará que el Congreso cree una comisión de pueblos originarios: “sería un espacio importantísimo y un reconocimiento”.
Entrevista: Diego Leonoff