Redacción Canal Abierto | “Somos doce empleados que desde que comenzó la pandemia estamos sin trabajar porque la empresa nos suspendió –cosa que es ilegal-. Nos mandaron una carta documento informándonos, una segunda reafirmándolo y la semana pasada nos llegó una carta de despido. Todas las rechazamos. Hasta ahora no hemos cobrado nada de nuestro salario y ya llevamos más de un mes de acampe”, relató Yanet Burdiles, administrativa de Expreso Argentino hace 14 años.
Neu-Sat SRL y sus responsables Sebastian Masip y Marina Costa, suspendieron a sus empleados al inicio de la cuarentena. Según el DNU 329/2020, esto está prohibido. Además, la empresa siguió trabajando por pertenecer a las actividades exceptuadas.
“La empresa nunca dejó de trabajar porque es de transporte de cargas generales y están exceptuados. Ellos aluden que están en crisis, pero todo es de palabra porque no hay nada escrito que avale que están en quiebra. Siguen trabajando con otras personas que ni siquiera están en blanco mientras nosotros, sus trabajadores, estamos abandonados”, agregó Burdiles.
Durante las primeras semanas del conflicto tuvieron varias reuniones en la Subsecretaría de Trabajo, pero no se llegó a ningún acuerdo. “Querían indemnizarnos con el 50% -ni siquiera de doble indemnización- y en doce cuotas. Nosotros sabemos que íbamos a cobrar la primera y nada más porque conocemos cómo se manejan. A lo largo de estos años ha despedido a trabajadores que se cansaron de reclamar su indemnización y no cobraron un peso”, informó la administrativa.
Hubo intentos de diálogo con la empresa. Incluso en las cuatro reuniones con la Subsecretaría de Trabajo nunca pusieron una propuesta concreta sobre la mesa y siguen firmes en no pagar. También provocaciones por parte Expreso Argentino, que convocó a los clientes a retirar la mercadería para enfrentarlos a los trabajadores.
Al respecto, Burdiles agregó: “El 22 de mayo decidimos quedarnos y acampar para hacer más fuerte nuestra lucha. Estamos en el local donde la empresa tiene la licencia comercial (San Martín 2425), y ellos están trabajando desde la ciudad de Cipolletti (ruta 51- Km9). Nosotros y gente que conocemos llegamos a esa dirección y pudimos comprobar que operan desde ahí. Todas las fotos y videos se los enviamos a la Subsecretaría de Trabajo”.
En medio de la crisis sanitaria, sostienen la lucha y esperan que el gobierno municipal y provincial intervenga pronto para lograr una solución. “Nos mantenemos firmes y fuertes gracias a distintas agrupaciones que se han acercado y la gente se ha solidarizado con nosotros. Los vecinos nos han traído mercadería y nuestras familias hacen guardias con nosotros”, finalizó Burdiles.