Redacción Canal abierto | El último informe de la Dirección de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires comienza a reflejar los efectos del ajuste. Durante la gestión PRO de Horacio Rodríguez Larreta, la indigencia creció un 98%.
En el tercer trimestre de 2015, las personas en esta situación eran 100.000. En el mismo período de 2018, la cifra alcanza a 198.000 que no pueden cubrir sus necesidades básicas alimentarias. Mientras, el índice de personas en situación de pobreza creció 54,3%.
De esta forma, el 20,85% de la población total de la ciudad queda debajo de la línea de pobreza, siendo 639.000 personas. Es decir, que 1 de cada 5 habitantes porteños es pobre.
Fuente: Dirección General de Estadística y Censos CABA
Mientras tanto la muestra del INDEC -que contempla a Capital y Gran Buenos Aires- arrojó para fines de 2017 un 4,8% de indigentes, con una baja de 1,3 en comparación con el tramo julio/diciembre de 2016. Durante el tercer trimestre de 2018, aunque con tendencia al alza, la tasa de indigencia no registró un cambio significativo al ubicarse en el 6,1% de las personas.
Estos números se obtienen a partir de las canastas de consumo, valorizadas según la variación de los precios. La línea de indigencia se define al establecer las necesidades básicas alimentarias. Para la pobreza, se agregan factores como vivienda y vestimenta.
Lo cierto es que en 2018, con una devaluación que rozó el 110%, y el traslado a precios que desencadenó la inflación más alta de los últimos 27 años con 47,6%, la indigencia aumentó un 50,9%, con respecto al año anterior, en concordancia con la pérdida de poder adquisitivo que generó la gestión de gobierno actual.